"Es verdad que duele mucho cuando se profana un templo nuestro. Nos duele también, de un modo muy hondo, que se lastime la fraternidad entre nosotros", afirmó el obispo de San Isidro.
La petición la hizo el arzobispo de San Juan de Cuyo, monseñor Jorge Lozano, al explicar por qué el Día de los Enamorados va unido a un santo y qué hizo para tener una fecha en el calendario anual.
"La vocación es un llamado de Dios, e implica siempre una misión. Toda tarea hecha con vocación debe servir al bien común", sostuvo el obispo de Posadas en su carta semanal.
El obispo celebró la misa del miércoles 30 de diciembre, día en que se aprobó la ley de "Interrupción Voluntaria del Embarazo" en el Senado de la Nación y se lamentó por la medida.