Mons. Mestre: 'Mirar el cielo, pero con los pies en la tierra'

El obispo de Mar del Plata, en sus meditaciones para la solemnidad de la Ascención del Señor, se concentró en 3 aspectos, sintetizados en las palabras "mediador", "siempre" y "cielo".

El obispo de Mar del Plata, monseñor Gabriel Mestre, en sus meditaciones sobre la solemnidad de la Ascensión del Señor, se concentró en tres aspectos, sintetizados en las palabras “mediador”, “siempre” y “cielo”.

Jesucristo, Mediador entre Dios y la humanidad
En este punto, el diocesano reparó en la forma en que “engrandece” lo celebrado en la fiesta del pasado domingo, ya que “Dios no solo ‘se hace carne’ sino que, a partir de la Ascensión, de alguna forma la humanidad está en el seno mismo de la Santísima Trinidad”.

En el mismo sentido, sostuvo: “La fiesta de la Ascensión nos ayuda a recuperar desde Dios la dignidad, grandeza y valor de todo lo humano”, y agregó a continuación que “Jesucristo es el Mediador, el puente único y absoluto porque participa de las dos orillas: es verdaderamente Dios y verdaderamente Hombre”.

“Cristo es el Mediador para recuperar en clave de alianza la dignidad de hijos de Dios”, reiteró.

“Yo estaré con ustedes siempre hasta el fin del mundo”
Respecto de este versículo (el último) del Evangelio según san Mateo, el obispo marplatense aseguró que revela “la seguridad absoluta de que, si bien Jesús asciende al cielo, nunca nos deja solos: siempre nos acompaña y acompañará”.

Al respecto, exclamó: “¡Cuánta serenidad debe darnos este texto en medio de las vicisitudes de la vida!”, a lo que añadió: “El Dios que se ha revelado en el Primer Testamento como firme, estable, verdadero y fiel, ahora en Jesucristo nos confirma esta misma perspectiva en su presencia segura hasta el fin de los tiempos: siempre, con nosotros, hasta el fin del mundo”.

Mirar el cielo, pero con los pies en la tierra
En este último punto, monseñor Mestre se refirió a la admonición de los ángeles dirigida a los apóstoles, “que se quedan mirando el cielo”, y comentó que “los interpelan porque no lo hacen con ‘los pies sobre la tierra’”.

“Levantamos la mirada al cielo, no para evadirnos de esta vida, sino para asumirla cada día con más responsabilidad”, pidió, y concluyó: “La clave será no olvidarnos de que somos ciudadanos del cielo, que ahí está el destino final de nuestra historia, esa es nuestra patria eterna que da sentido a nuestro transitar cotidiano".+