Haití: la crisis del país se agrava por el brote de cólera

Los misioneros viatorianos permanecen junto a la población con fe y determinación

“Cada día trae su propio sufrimiento. Desgraciadamente, desde hace años, cuando se habla de Haití se piensa en un país de catástrofes: económicas, ecológicas, políticas, demográficas”, manifestó a la Agencia Fides el padre Nestor Fils-Aimé, superior provincial de Canadá de los Clérigos de San Viator (CSV). 

Y agregó: “Desgraciadamente, cada vez que se habla de esta tierra, aunque es rica en recursos naturales y humanos y con una bella historia, se denuncian crisis, emergencias, violencia”. El misionero se refiere en particular a los últimos acontecimientos de estas semanas de junio, cuando se ha visto al país azotado por deslizamientos de tierra, inundaciones y repetidos temblores de tierra, a lo que se añade que actualmente está experimentando un resurgimiento de los casos de cólera.

“Los primeros días de junio fueron difíciles -prosigue el viatoriano-. Las fuertes lluvias torrenciales hicieron subir las aguas, provocando inundaciones, con los consiguientes daños materiales y pérdidas de vidas humanas en la región metropolitana de Puerto Príncipe y en las zonas de Croix-des-Missions, Tabarre, etc., así como en el sur del país, en los distritos de Léogâne y Grand'Anse, cerca de Jérémie. A raíz de ello, según un cálculo bastante prudente, podría haber unas sesenta personas muertas, veinte desaparecidas y entre 35.000 y 40.000 casas inundadas. Además, un sismo de magnitud 5,7, que sacudió Grand'Anse el 6 de junio, ha causado al menos cuatro muertos y se teme que haya más de cuarenta heridos”.

“Es un gran reto para nosotros -destacó el padre Fils-Aimé-, ya que soñamos siempre con una mejora que tarda en materializarse. No obstante, seguimos siendo optimistas y continuamos actuando con la misma fe y determinación, para crear espacios de luz, alegría y esperanza”.

La infraestructura de los Clérigos de San Viator no se ha visto directamente afectada, aunque tienen una casa de formación en Cazeau, muy cerca de Croix-des-Missions. Los misioneros dirigen una escuela y son responsables de una parroquia en Croix-des-Bouquets, barrio cercano a Croix-des-Missions, donde el padre Jean-Yves Médidor, CSV, fue secuestrado el pasado mes de marzo. Afortunadamente, tampoco se produjeron daños considerables en la parroquia de San Francisco de Asis, en Grand-Goâve, que los viatorianos administran a unos sesenta kilómetros al sur de la capital, no lejos de la ciudad de Léogâne.

Por otro lado, desgraciadamente, el viernes 9 de junio las autoridades sanitarias haitianas confirmaron que un nuevo brote de cólera había causado la muerte de varios centenares de personas en el país caribeño. Según los datos difundidos, la epidemia, que golpeó por primera vez Haití en octubre de 2010, mató a 10.174 personas y, desde octubre de 2022, han muerto otras 726 personas, de las cuales 26 fallecieron del 1 al 5 de junio de este año. En el periodo comprendido entre el 1º de octubre del año pasado y el 5 de junio de 2023 se han registrado 45.248 casos sospechosos, 3007 confirmados y 41.557 hospitalizaciones. La edad media de los contagiados hospitalizados es de 17 años.

La crisis múltiple que afecta actualmente a Haití tiene sus orígenes en el golpe de Estado de 2004, según informó Fides.+