Cuba: Piden "no olvidar" a los presos políticos de las protestas en julio de 2021
- 18 de julio, 2022
- La Habana (Cuba) (AICA)
La detención de las 700 personas "sigue causando dolor y angustia a muchos, especialmente a los familiares de los detenidos", escribe la Conferencia Cubana de Religiosos en un comunicado.
La Conferencia Cubana de Religiosos (ConCuR) pidió “no olvidar” a las 700 personas que siguen en prisión a raíz de las manifestaciones del 11 de julio de 2021, por ello sigue apostando por un servicio de acompañamiento de los privados de libertad y de sus familias.
Esta situación “sigue causando dolor y angustia a muchos, especialmente a los familiares de los detenidos”, inclusive “existe un número de detenidos que aún no fueron a juicio, violándose los plazos ordinarios y extraordinarios que establece la ley”.
Por tanto, “pedimos el sobreseimiento definitivo de los acusados que no fueron juzgados, así como el procedimiento de revisión contra las sentencias firmes condenatorias de las personas juzgadas”.
De hecho, según explican, “este último procedimiento puede ser iniciado por las autoridades correspondientes a instancia de alguna persona o institución, es decir, las familias pueden solicitarlo”.
Además, denunciaron que “en las vistas de apelación efectuadas continúan sin admitirse y valorarse adecuadamente las pruebas presentadas por la defensa, lo cual va en detrimento de los acusados”.
“La situación general actual es semejante a la que vivíamos hace un año, o aún peor. Con dolor, lamentamos que las sanciones y todo el proceso de los detenidos hace un año sean usados como recurso intimidatorio”, lamentan.
Por ello, hacen un enérgico llamado a la ciudadanía a no ser indiferentes, porque “como parte de esta sociedad en la que vivimos y a la que acompañamos de diversos modos, esto nos preocupa y duele”.
El 11 y 12 de julio de 2021 se produjeron enfrentamientos entre la población y la policía en las principales ciudades cubanas, con numerosas detenciones. Las protestas se debían a la exasperación de la población, que tenía dificultades para conseguir alimentos, debido al aumento de los precios, el agravamiento de la pandemia y la falta de democracia. Las principales agencias de noticias informaron de que, para el gobierno cubano dirigido por Miguel Díaz Canel, se trataba de una maniobra para "desestabilizar" la Isla.
La Iglesia local, a través de la Conferencia Episcopal de Cuba, citando al papa Francisco, recordó que “las crisis no se superan con la confrontación, sino cuando se busca el entendimiento”, para luego advertir: “la violencia engendra violencia, la agresión de hoy abre heridas y alimenta futuros resentimientos que tardarán en superarse”. Por ello, invitaban a todos “a no favorecer la situación de crisis, sino a ejercitar, con serenidad de espíritu y buena voluntad, la escucha, la comprensión y una actitud de tolerancia, que tenga en cuenta y respete al otro, para buscar juntos soluciones justas y adecuadas”.
La Conferencia Cubana de Religiosos (ConCuR) en aquel momento también comentó la situación cubana: “Los que salieron a la calle no son delincuentes, son gente común de nuestras ciudades que encontraron una forma de expresar su descontento”. Por lo que propusieron “cinco puntos que nos parecen esenciales para superar la difícil situación actual y construir la fraternidad entre todos”.+