Mons. Torrado Mosconi celebró la misa crismal y pidió por el fin de la pandemia
- 29 de mayo, 2020
- Nueve de Julio (Buenos Aires) (AICA)
El obispo de Nueve de Julio presidió la misa crismal
La misa crismal de la diócesis de Nueve de Julio, postergada de su fecha original debido a la pandemia, fue celebrada el jueves 28 de mayo en la catedral Santo Domingo de Guzmán por el obispo diocesano, monseñor Ariel Edgardo Torrado Mosconi.
Cada año, unos días antes de la Pascua, la misa crismal reúne a representantes de las comunidades parroquiales y a los sacerdotes, para la bendición de los santos óleos y la renovación de las promesas sacerdotales.
En esta oportunidad, la celebración se fue postergando ante la posibilidad de poder efectuarla con la participación de los fieles, pero debido a la prolongación de la cuarentena, finalmente se efectuó el jueves anterior a la festividad de Pentecostés, con la que culmina el tiempo pascual.
La celebración fue seguida por más de 5.000 fieles gracias a los medios de comunicación y a las redes sociales que la retransmitieron. Fue concelebrada por el obispo emérito de Nueve de Julio, monseñor Martín de Elizalde OSB, junto con algunos sacerdotes en representación del presbiterio. Estuvieron presentes un reducido número de religiosas y laicos para las lecturas y el canto, representado también al conjunto del pueblo de Dios.
En la homilía, el obispo diocesano valoró la respuesta a la emergencia de la pandemia desde los distintos ámbitos de la diócesis, y agradeció la pronta reacción, tanto del laicado en la acción social mancomunada como de los sacerdotes, para seguir atendiendo pastoralmente a los fieles: “Como creyentes -mirando particularmente la vida de nuestra diócesis- tengo la impresión de que hemos reaccionado y respondido con acierto, rapidez y generosidad” afirmó.
Asimismo, pidió a Dios ser liberados de esta pandemia para poder celebrar el culto públicamente en las iglesias, como verdadera necesidad esencial espiritual tan fundamental para los fieles: “Sea esta celebración como una verdadera súplica y clamor a Dios para que nos libere de la pandemia y podamos volver a participar de manera ordinaria de la Eucaristía y los demás sacramentos, fuente de vida nueva para los creyentes, significados en los santos óleos… En fin, la celebración de hoy, es toda ella un acto de confianza para que, lo más pronto posible, podamos volver a participar con alegría de la liturgia sacramental” sostuvo.
Alentando la esperanza y convocando a la familia diocesana a la unidad en la misión, el obispo concluyó la homilía recordando el llamado del papa Francisco a ser una Iglesia misionera “en salida” y una verdadera comunidad “hospital de campaña” que cuida, sana y recupera los espíritus de las personas heridos por esta situación de angustia y sufrimiento: “En esta hora de la historia, más que nunca, cobra nuevamente vigencia la llamada del Santo Padre a ser ‘Iglesia en salida’ buscando nuevos modos de misión y ‘hospital de campaña’ ya que hay tanto para curar en nuestra sociedad herida, desorientada y, a veces, ‘agrietada’, animó.+