Jueves 14 de noviembre de 2024

Mons. Olivera: "Consagrarnos para ser, en medio del mundo, testigos de amor"

  • 28 de junio, 2019
  • Buenos Aires (AICA)
"Queremos consagrarnos y consagrar nuestra diócesis para amar como Jesús, que ama a todos y ama siempre. Queremos consagrarnos para ser en medio del mundo testigos de ese amor", expresó esta mañana el obispo castrense, monseñor Santiago Olivera, al celebrar el 62º aniversario del obispado, en el día del Sagrado Corazón de Jesús.
Doná a AICA.org
El obispado Castrense de la Argentina celebra hoy, viernes 28 de junio, su 62º aniversario, en el día del Sagrado Corazón de Jesús. Su obispo, monseñor Santiago Olivera, presidió esta mañana la misa de acción de gracias en la catedral Nuestra Señora de Stella Maris.

El 28 de junio de 1957 se creó el Vicariato Castrense, establecido por el acuerdo entre la Nación Argentina y la Santa Sede "Sobre jurisdicción castrense y asistencia religiosa a las fuerzas armadas".

"La imagen del Sagrado Corazón de Jesús nos recuerda el núcleo central de nuestra fe: Dios nos ama sin límites, Dios se manifiesta en Jesús, ?es el Dios con nosotros?, Jesús es el rostro del Dios Amor, y el Corazón de Jesús es signo claro de ese amor que se entrega y se ofrece por nuestro rescate, para nuestra salvación", comenzó diciendo monseñor Olivera.

Ser defensores de la verdad y la justicia
Enseguida indicó que esta fiesta "nos da la posibilidad de renovar la certeza de que Jesús pasa por nuestra vida amando, pasa sanando, pasa liberando, y también podemos constatar tristemente lo que Jesús experimenta, según nos contó Santa Margarita María de Alacoque, que es el desprecio, la ingratitud y la irreverencia de muchos de los hombres".

El obispo castrense consagró a las Fuerzas Armadas y Fuerzas Federales de Seguridad al Sagrado Corazón de Jesús: "Queremos consagrarnos y consagrar nuestra diócesis para amar como Jesús, que ama a todos y ama siempre. Queremos consagrarnos para ser en medio del mundo testigos de ese amor. Pero también valientes defensores por amor de la verdad y la justicia".

Detenciones injustas y fuera de la ley
Luego manifestó: "Esta es la fiesta propicia en la cual, sabiéndonos amados así por Jesús, renovados, reemprendemos el camino, muchas veces hemos experimentado situaciones parecidas, miembros de nuestra familia diocesana, han experimentado la soledad, la ingratitud, detenciones injustas, prisiones preventivas largas y fuera de la ley, enfermedades, entregas de la vida por la Patria no valoradas en su real y justa medida".

Asimismo, declaró "como obispo diocesano castrense y la misma diócesis hemos tenido la gracia de ser asociados a muchas calumnias y mentiras, pero queremos amar como Jesús, por eso nos queremos consagrar".

"Deseamos renovar el modo de amar del Señor, expresado tan certeramente en su Corazón abierto. Señor queremos que nos ilumines, que nos adviertas de nuestros peligros, que nos ayudes en nuestras tentaciones, que nos alientes en nuestros contratiempos".

Al concluir, el prelado castrense dio gracias por la presencia de los capellanes de las distintas Fuerzas que concelebraron la Eucaristía, y a los fieles que participaron de la celebración. Y le pidió a María, "Madre del amor, mujer del sí generoso, recibe el deseo de nuestra diócesis Castrense de amar a tu Hijo Jesús sin reservas, amando a los hermanos, a todos sin exclusión".+

» Texto completo de la homilía