Mons. Moon: En la actualidad, el encuentro con Jesús se da en los sacramentos
- 26 de junio, 2021
- Venado Tuerto (Santa Fe) (AICA)
El obispo coadjutor de Venado Tuerto predicó sobre los dos milagros realizados por Jesús en las lecturas de este domingo y eligió tres aspectos "creer", tocar" y "salvar".
El obispo coadjutor de Venado Tuerto, monseñor Han Lim Moon, eligió tres aspectos: “creer”, tocar” y “salvar”, para meditar sobre el Evangelio de este treceavo domingo del año.
La fe como el “creer”
“El Evangelio nos presenta a Jairo quien, arrojándose a los pies de Jesús, le pidió que lo acompañara a su casa para que le impusiera las manos a su hijita moribunda. Y así, se curará y viviera. Porque Jairo creyó en el poder y misericordia de Jesús y Él aceptó ir inmediatamente”, indicó.
“En el camino, se acercó una mujer que padecía de hemorragias desde hacía doce años, y que había oído hablar sobre el poder y misericordia de Jesús. Y al acercarse, sin que nadie se diera cuenta, le tocó su manto porque creyó firmemente en Él”, destacó.
El prelado explicó que es “importante transmitir a todos los hombres esta Buena Noticia de Jesús. Porque la fe de esta mujer justamente fue suscitada por haber escuchado hablar acerca de Él. Además, tanto en la mujer como en Jairo, la fe aumentó por la gran necesidad que los movilizó hacia Jesús”.
La fe como el “tocar”
“El contacto físico por la imposición de manos a la hijita de Jairo y el tocar el manto de Jesús por parte de la hemorroisa suscitan un encuentro personal con Jesús y un fuerte vínculo con Él por la fe”, subrayó.
Monseñor Moon aclaró que “no todos los contactos físicos significan un encuentro personal con Jesús, de hecho, había una gran multitud que lo apretujaba por todos lados. Sin embargo, por falta de fe en Él, simplemente podrían haber sido contactos superficiales”.
“En la actualidad, este encuentro con Jesús se da en los sacramentos y, también, cuando tocamos las imágenes religiosas con fe y devoción”, agregó.
La fe que “salva”
“Jesús le dijo a la hemorroísa: ‘Hija, tu fe te ha salvado…queda curada de tu enfermedad’. Es decir, ante todo, Jesús afirma que ella está salvada, y la curación física es signo de su salvación integral: cuerpo y alma para la vida eterna”, señaló.
“Así fue también con la hijita muerta de Jairo cuando Jesús le dijo: ‘Niña, yo te lo ordeno, levántate’. Efectivamente, la resurrección de la hija de Jairo no fue sólo la curación de su enfermedad, sino también, un anticipo de la resurrección definitiva, que viene del Señor de la Vida”, concluyó.+