Mons. Han Lim Moon: "Esta noche apareció una gran luz en medio de la oscuridad"
- 26 de diciembre, 2018
- San Martín (Buenos Aires)
En su mensaje para la Solemnidad del Nacimiento de Jesús, este 25 de diciembre, monseñor Han Lim Moon, obispo auxiliar de San Martín, denominó la Nochebuena como aquella noche "en que sucedió un acontecimiento que marcó un antes y un después en la historia de la humanidad".
"Esa gran luz que apareció se llama Jesús, que quiere decir, ´Dios Salva´ -prosiguió-, ya que Él salva a los hombres de esa oscuridad, de esa desorientación, del desánimo, de la desesperanza que están en lo profundo de su corazón. A partir de esa luz de Jesucristo los hombres que lo aceptan, empiezan a ver y recuperar el sentido de la vida y la esperanza"
El prelado de San Martín habló del Dios que "rompió el silencio", el silencio de la indiferencia, de la frialdad y de la incomunicación, "que marca ´distancia´ a pesar de la ´cercanía física´, que hace mal al hombre, del cual todos tenemos experiencia". De este modo, "su Palabra se hizo carne", y se llamó Jesús, "quien salva rompiendo el muro de la incomunicación y de la división entre Dios y los hombres y de los hombres entre sí", sostuvo.
"¡Cuánta necesidad tenemos de comunicación, diálogo y comunión! ¡Cuántas incomprensiones, divisiones, odio y guerras evitaríamos si tuviéramos diálogo! ¡Nos haría más hermanos!", reflexionó monseñor Han Lim Moon. Luego, al hacer referencia al Evangelio de San Juan, explicó que la Palabra de Dios al hacerse niño, "comienza a ´derretir´ la rigidez de la incomunicación y de la desunión", porque un bebé "transmite ternura, amor, vida, paz, pureza, consuelo, aliento, esperanza".
Al finalizar, resaltó la decisión de Dios de regalarnos a su Hijo, motivo de alabanza "a Jesucristo, la Luz, la Palabra de comunión, al Espíritu Santo quien engendró a Jesús en el seno de la Virgen María; y a Ella le damos gracias, muchas gracias porque nos trajo a Jesús", concluyó.+