Mons. García Cuerva: 'Compartir la Buena Noticia de que Jesús está vivo y te ama'
- 19 de abril, 2023
- Río Gallegos (Santa Cruz) (AICA)
El obispo de Río Gallegos presidió la celebración de la fiesta de la Divina Misericordia, que es "Dios que se conmueve con todo su corazón ante nuestra miseria y cuyo amor no tiene límites".
El obispo de Río Gallegos, monseñor Jorge Ignacio García Cuerva, presidió la Eucaristía desde la catedral local por el segundo domingo de Pascua, en la fiesta de la Divina Misericordia.
En la homilía, el prelado expresó que “hoy Jesús se muestra a sus discípulos; este Jesús vivo y resucitado que venció a la muerte para siempre, y no se muestra así nomás, sino que se muestra con sus manos con la marca de los clavos, se muestra con su costado donde está la marca de la herida de la cruz. Podríamos decir, hoy, que el Jesús vivo que se hace presente a los discípulos es el Dios de las cicatrices, herido, pero herido de amor”.
Seguidamente, señaló: “Qué lindo entonces que también nosotros, como esos discípulos, que quizá estamos atemorizados, angustiados, entristecidos, podamos recibir en esta Pascua el más lindo de los mensajes: Jesús te ama, y te ama tanto y con tanta locura, que es capaz de entregar su vida en la cruz por vos, y hoy te muestra las pruebas de ese amor, te muestra esas heridas y esas marcas de amor”.
Monseñor García Cuerva señaló que la Misericordia “es justamente eso, es el Dios que se conmueve con todo su corazón ante nuestra miseria, es el Dios que con su amor perdona todos los pecados, es el Dios que dice que su amor no tiene límites, y por eso hoy te muestra sus marcas, marcas que no son marcas solamente del sufrimiento que pasó en la Cruz, son marcas de amor, porque entregó su vida porque te ama”.
En esa sintonía, el obispo de Río Gallegos aseguró que, “así como el Padre lo envió a Jesús, Él también nos envía a nosotros. A través de nosotros, la gente se encuentra de verdad con el amor de Dios”, y se preguntó: “En nuestras parroquias y en nuestras comunidades, quien se acerca, ¿se encuentra con Jesús, que está herido de amor por nosotros, o se encuentra con una imagen falsa de un Dios juez, que condena, de un Dios gendarme que pide papeles y exige requisitos?”.
“Nosotros, que tenemos que ser testigos del Resucitado, nuestras comunidades, que tienen que ser testigos de Jesús resucitado, cuando nuestra gente viene, ¿le mostramos las heridas por amor del Señor?, cuando la gente viene, ¿se llena de paz y alegría?”, continuó.
Finalmente, pidió que “en este domingo de la Misericordia volvamos a lo central: Jesús está vivo y te ama. Nosotros tenemos que compartir esa noticia con todos, para que los corazones de nuestros hermanos, especialmente de los que más tristes y angustiados están, se llenen de alegría”.+