Mons. Medina: 'Abrirnos a la presencia del Señor y acercarnos a Él con confianza'

El obispo de Río Gallegos manifestó que, "a través de esa conciencia de este Dios que viene a salvarnos, es que nosotros también encontramos ese sentido, esa esperanza y alegría de seguir su camino".

El obispo de Río Gallegos, monseñor Ignacio Medina, celebró la Eucaristía correspondiente al tercer domingo del tiempo pascual.

En su prédica, recordó que la Palabra de Dios “nos interpela una vez más a este encuentro con el Señor, como aquellos que lo seguían, los discípulos”.

“Muchas veces en nuestra vida -dijo-, a través de los acontecimientos que vamos viviendo, nos resistimos a creer en el Señor Jesús. También nosotros, discípulos participando de la vida del Resucitado, muchas veces nos resistimos a creer en Aquel que ha sido enviado por Dios Padre, y el Señor se sigue manifestando al corazón de cada uno de nosotros”.

“Sin embargo, somos de corazón duro y necesitamos de esa presencia del Señor para que, a través del Espíritu Santo, Él también vaya abriendo nuestra conciencia y nuestro corazón a su presencia”, continuó.

El diocesano afirmó: “Tenemos que dejarnos amar por Dios, dejarnos querer por Él y, a través de esa conciencia de este Dios que viene a salvarnos, es que nosotros también encontramos ese sentido, esa esperanza y alegría de seguir el camino de Jesús, esta propuesta evangélica que Él nos trae”. “El Señor nos llama a que podamos abrirnos a su presencia y acercarnos a Él con confianza, poner nuestra confianza en Dios”, enfatizó.

Recordó también que, “en esta semana, celebramos los 62 años de nuestra diócesis y, muchas veces, vivimos la adversidad, adversidad por la distancia y porque no podemos, por todo el territorio que tenemos, llegar como quisiéramos. Pero el Señor nos dice: ‘Pongan su confianza en mí, no en ustedes. Soy Aquel que viene a acompañarlos, Aquel que está con ustedes y los discípulos de Emaús, al costado del camino’”.

“Pedimos para que el Señor Jesús siga acompañando a esta Iglesia de Río Gallegos, sabiendo que estamos llamados a vivir este Cristo que es nuestra Luz”.+