Mons. Braida en la fiesta de San Nicolás: "Dios nos quiere vivos y activos en nuestro tiempo"
- 6 de julio, 2020
- La Rioja (AICA)
La diócesis de La Rioja celebró la fiesta de invierno de San Nicolás de Bari en la jornada del domingo 5 de julio. Sin presencia de fieles, la procesión se realizó alrededor de la plaza 25 de Mayo.
En el marco de los 100 años de aureolización de la imagen de San Nicolás de Bari, la diócesis de La Rioja celebró la fiesta de invierno en honor al santo patrono en la jornada del domingo 5 de julio. El obispo diocesano, monseñor Dante Gustavo Braida, encabezó la celebración acompañado por sacerdotes de la diócesis.
El lema de las fiestas este año fue “Cristo vivo, corona de los santos”, con el sublema: “Con María del Valle, madre del pueblo y San Nicolás, amigo de los pobres, seamos santos de este tiempo”. Los servidores de San Nicolás, el cuerpo de policías y equipo del gobierno de La Rioja, acompañó la procesión custodiando las imágenes de San Nicolás y la Virgen del Valle. Además, participó la Banda de la Policía de la provincia entonando el himno a San Nicolás. El gobernador y la intendenta de la capital decidieron no asistir acompañando las medidas de seguridad.
Al culminar la procesión, monseñor Braida habló en el atrio de la catedral y santuario de San Nicolás de Bari. En el comienzo de sus palabras hizo mención a la presencia de la Virgen del Valle, en el Año Mariano Nacional y al cuadro de los beatos mártires riojanos, que acompañaron a San Nicolás en la procesión.
El obispo saludó “a todos los que siguen esta procesión desde sus hogares, desde distintos puntos de la provincia y del país les digo que aquí junto a San Nicolás están cada uno de ustedes como Él está en cada uno de sus hogares y en sus corazones. Y si sentimos cierto dolor por no estar aquí, ofrezcámoslo a Dios, que Él puede tomar ese ofrecimiento y hacernos mucho bien y hacer mucho bien a otras personas”.
Al recordar sus palabras del 1 de enero, monseñor Braida animó a continuar por el camino sinodal, aun en tiempos de pandemia: “Lo sinodal tiene que ver con eso, con asumir juntos la realidad tal como es y descubrir en ella los signos de la presencia de Dios y lo que en ella debe ser cambiado porque no condice con el Reino que él vino a establecer”. Y destacó que para muchos este tiempo ha sido una oportunidad de algo nuevo.
“Esta ´tormenta inesperada’ de la pandemia es una gran oportunidad para unirnos, no solo para enfrentar los problemas que ella nos plantea, sino también para aprender a enfrentar los problemas de fondo que quizás hace mucho venimos arrastrando y que ahora se han puesto más de manifiesto: pienso en la necesidad de generar más espacios de diálogo entre diferentes sectores sociales; en fomentar más posibilidades de trabajo; ofrecer más, mejores y claras respuestas a la cuestión de la adicciones, lo que sin dudas requiere un mayor compromiso de diversos sectores sociales y de las Iglesias en particular para ser abordado eficazmente”.
Monseñor Braida resaltó que “como cristianos tenemos en el Evangelio y en las enseñanzas de la Iglesia un tesoro enorme para compartir con decidido compromiso misionero, como corresponde a todo bautizado. Juntos caminemos hacia adelante con esperanza”.
Antes de finalizar, dijo a la comunidad riojana: “Dios nos quiere vivos y activos en nuestro tiempo. Confía en nosotros y nos invita a confiar en Él e iniciar, junto a otros hermanos, profundos procesos de transformación. No dejemos pasar esta oportunidad de cambiar el rumbo de la historia”, e invocó la intercesión de San Nicolás y de los cuatro beatos mártires: Wenceslao, Carlos, Gabriel y Enrique: “Que ellos nos asistan en el camino de santidad que cada uno tenemos que transitar en este tiempo. Nuestra Madre del Valle, como servidora de la esperanza, sea la que nos anime a seguir a su hijo Jesús con espíritu orante y comprometido, mientras caminamos hacia la Patria eterna del Cielo donde Él ya nos tiene preparado un lugar junto a los innumerables santos y santas de Dios”, concluyó.
La ceremonia fue transmitida a toda la provincia mediante la señal de canal 9, FM La Torre, diferentes medios de comunicación que se sumaron a la transmisión y las distintas redes sociales diocesanas.+