Mar del Plata: la Pastoral de Barrios Populares compartió un encuentro diocesano
- 17 de septiembre, 2024
- Mar del Plata (Buenos Aires) (AICA)
Casi doscientos participantes vivieron la jornada, que se llevó a cabo el sábado 14 de septiembre en la parroquia San Benedetto, con el objeto de renovarse en el fervor misionero.
Para renovarse en el fervor misionero, la Pastoral de Barrios Populares de Mar del Plata, que se enfoca en las parroquias y comunidades de las periferias, compartió el sábado 14 de septiembre un encuentro diocesano, realizado en la parroquia San Benedetto.
Casi doscientos participantes estuvieron presentes en la jornada, que comenzó con un momento de oración presidido por el párroco, presbítero Héctor Díaz. El altar fue recibiendo imágenes de santos y beatos argentinos, que llevaron en procesión fieles de distintas comunidades. Finalmente, se recibió la imagen de la Virgen de Luján, a quien se encomendaron todos en oración.
El administrador apostólico, monseñor Ernesto Giobando SJ, tuvo a su cargo un momento de reflexión, durante el que destacó su anhelo de que "el fruto de este encuentro sea renovarnos en la misión".
Basándose en diferentes pasajes del Evangelio, el prelado destacó la "importancia de estar con Jesús y de ser enviados, que son dos elementos inseparables." Asimismo, citando pasajes de una catequesis del Papa Francisco, pidió "renovar el celo apostólico, teniendo pasión por evangelizar, ganas de misionar". "Para Jesús, no hay ir sin estar", enfatizó.
El encuentro continuó con trabajos por grupos, en los que se reflexionó sobre los espacios y momentos que ofrecen las comunidades para estar con el Señor y sobre el anuncio en el contexto de los barrios populares.
Ana Laura Vulcano, quien participó de la organización del encuentro, destacó que "la misión en los barrios populares se caracteriza por una presencia cercana y constante de los agentes pastorales, que comparten la vida cotidiana de los habitantes de los barrios y de las periferias que, como dice el Papa, no son solo un lugar geográfico, sino un espacio simbólico donde la vida humana está en riesgo, donde las injusticias se ven de manera más clara y donde la Iglesia está llamada a hacerse presente con mayor urgencia".+