Jueves 14 de noviembre de 2024

La arquidiócesis de Mercedes-Luján celebró el Día del Seminario

  • 22 de agosto, 2019
  • Mercedes (Buenos Aires) (AICA)
El arzobispo de Mercedes-Luján, monseñor Agustín Radrizzani SDB, presidió el 21 de agosto una misa en el seminario Santo Cura de Ars, de la ciudad de Mercedes, en el marco de la Jornada Sacerdotal Anual, que reunió a los exalumnos de la institución.
Doná a AICA.org
En el seminario Santo Cura de Ars, en la arquidiócesis de Mercedes-Luján, se llevó a cabo el miércoles 21 de agosto la Jornada Sacerdotal Anual en celebración del "Día del Seminario", que reunió a exalumnos de la institución, entre ellos quienes cumplen 25 años de egresados.

En ese marco, el arzobispo, monseñor Agustín Radrizzani SDB, presidió la Eucaristía en la capilla del seminario, concelebrada por el obispo auxiliar, monseñor Jorge Eduardo Scheinig, el rector del seminario, monseñor Darío Kling, demás formadores y sacerdotes provenientes de distintas diócesis, que se formaron en dicha casa. Compartieron la celebración los seminaristas que actualmente se preparan camino al sacerdocio.

En su homilía, monseñor Radrizzani expresó su alegría por poder compartir la celebración del Día del Seminario y los 25 años de egreso de los sacerdotes Daniel Guerra, Carlos Tibberi, Horacio Lento, Juan Ángel del Giorgio, Eduardo Campion y Marcelo Monteagudo.

"Es esta una feliz ocasión para dar gracias a Dios por la vocación que nos ha regalado y mirar con esperanza el futuro", afirmó. "¡Que inmerecida gracia sabernos amigos de Dios e identificados con Jesucristo!", exclamó.

[img]http://www.aica.org/subidas/6330.jpg[/img]

Recordando el camino recorrido por quienes pasan por el seminario, el arzobispo enumeró "alegrías, tristezas, decepciones, fracasos, aplausos y mucha gente que, aún sin decirlo, encontró en nuestra mirada, en nuestra palabra, en nuestra conducta, el ejemplo que le permitió seguir creyendo y seguir caminando en la vida".

"Por eso, los que llevamos varios años en el ejercicio del ministerio, los que recién comienzan y en modo especial estos hermanos nuestros que celebran sus Bodas de Plata, todos, debemos dar infinitas gracias a Dios por la vida que nos regaló y la hermosa vocación a la que nos llamó", sostuvo.

En ese sentido, agradeció a los sacerdotes por el don de la fidelidad, y parafraseando a la Madre Teresa de Calcuta, expresó: "Nuestra vida no es más que una gota en el océano, pero decimos con Teresa de Calcuta, que si no nos entregamos al océano, al mundo, a la Iglesia de hoy le faltaría esa gota".

"Queremos, con la Gracia de Dios, seguir sirviendo a la Iglesia, donde ella nos necesite, para que el Reino de Dios siga creciendo en el mundo actual. Un mundo lleno de contradicciones y posibilidades de bien, un mundo que mira y sueña con la fraternidad universal, con la paz, y con el respeto a la dignidad de toda persona. Dios está con nosotros y algo que me fortalece cada día es la promesa de Jesús: ?Yo estaré con ustedes hasta el fin del mundo?", añadió.



Finalmente, dirigiéndose a los futuros sacerdotes, el prelado aconsejó: "Queridos seminaristas, aprovechen al máximo este tiempo de gracia en su formación. El objetivo primordial del seminario es formar pastores, formar hombres discípulos y misioneros para el Pueblo de Dios. Recuerden que cada uno de ustedes es protagonista de su propia formación y, con la ayuda de los formadores, deben trazar un camino de constante crecimiento en el ámbito humano, espiritual, intelectual y pastoral, teniendo en cuenta la propia historia personal y familiar, pero todo ello en un clima formativo coherente con los valores evangélicos".

"Pidamos al Cura de Ars, ser testigos apasionados del amor del Cristo y quiera el Cura Brochero que aprendamos a ser felices gastándonos por los demás. Que la intercesión de María de Luján, nuestra madre, nos permita obtener esas gracias", concluyó.+

» Texto completo de la homilía