El Papa agradeció al benedictino que predicó los ejercicios espirituales de Cuaresma
- 15 de marzo, 2019
- Ariccia (Italia) (AICA)
El papa Francisco concluyó este viernes los ejercicios espirituales de Cuaresma junto con miembros de la Curia romana y agradeció al el abad Bernardo Francesco Maria Gianni OSBOliv, de la abadía de San Miniato al Monte, por predicarles sobre la esperanza, el trabajo y la paciencia. "Me ha impresionado tu trabajo para hacernos entrar, como hizo el Verbo, en lo humano; y entender que Dios siempre se hace presente en lo humano", subrayó.
Los ejercicios espirituales con ocasión de la Cuaresma tuvieron lugar desde el martes 10 de marzo en la casa del Divino Maestro de Ariccia, en las afueras de Roma, y tuvieron como tema: "La ciudad de los ardientes deseos. Miradas y gestos pascuales en la vida del mundo".
"Quiero agradecerte, hermano Bernardo, por su ayuda en estos días. Me ha impresionado tu trabajo para hacernos entrar, como hizo el Verbo, en lo humano; y entender que Dios siempre se hace presente en lo humano", expresó el pontífice.
"Lo hizo la primera vez en la encarnación del Verbo, total, pero también está presente en las huellas que deja en lo humano", recordó, y completó: "Él también está presente en las huellas que deja en lo humano. Igual a la Encarnación de la Palabra, indivisa y sin confusión, está ahí".
El Papa también le agradeció al predicador que haya abordado el tema de la memoria, un "dimensión "deuteronómica", reconoció, que "olvidamos", y por haberles hablado de "esperanza, de trabajo, de paciencia, e indicarnos el camino de la ?memoria del futuro? que nos lleva siempre hacia adelante".
Francisco dijo que en estos días pensó en el documento del Concilio Vaticano II Gaudium et spes, al considerar que ese texto es "quizás el documento que ha encontrado más resistencias, incluso en la actualidad".
"En algún momento te vi de esta manera: como con la valentía de los Padres conciliares cuando firmaron ese documento. Muchas gracias", manifestó.
"Ruega por nosotros que todos somos pecadores, todos nosotros, pero queremos seguir adelante así, sirviendo al Señor. Muchas gracias y saluda a los monjes de mi parte y de la de todos nosotros. ¡Gracias!", concluyó.+