Sábado 19 de abril de 2025

Ecuador: los obispos llaman a votar con esperanza

  • 8 de abril, 2025
  • Quito (Ecuador) (AICA)
La Iglesia ecuatoriana motiva a acudir a las urnas y a hacerlo con compromiso ético: "Con nuestro voto, podemos escribir una nueva historia para el Ecuador". Llamado al diálogo y a la unidad.
Doná a AICA.org

La Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) instó a los ciudadanos a participar activamente en el proceso electoral, promoviendo la esperanza, el diálogo y el compromiso con el bien común para superar la crisis del país.

"Como pastores de la Iglesia Católica, llamamos a todas las fuerzas democráticas, independientemente del resultado, a poner lo mejor de sí: su voluntad y su inteligencia al servicio del Ecuador, superando toda forma de violencia y polarización", escriben los obispos ecuatorianos ante la segunda vuelta de las elecciones presidenciales que se llevará a cabo el domingo 13 de abril de 2025. 

En un comunicado emitido por el Consejo de Presidencia de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEC), se insta a todos los ciudadanos a participar activamente en el proceso electoral con una mirada de esperanza.

"La crisis que vive Ecuador, exacerbada por la pobreza, la corrupción, la impunidad y el crecimiento de la violencia debido a la presencia de mafias y grupos delictivos, exige que la ciudadanía se una en torno a un objetivo común: la reconstrucción de una nación que recupere su paz, estabilidad y bienestar", contextualiza

La urgencia de la unida
La Iglesia Católica hace un llamado claro y directo a la unidad. "La urgencia del presente nos exige que volvamos a ser hermanos y amigos, libres de odio, de revancha y de mezquinos intereses", expresan los líderes eclesiásticos.

Esta exhortación resalta la necesidad de dejar atrás las divisiones y trabajar juntos, sin caer en la polarización ni en la confrontación destructiva. El voto debe ser una herramienta para la transformación positiva del país, no un medio para fomentar la división.

Además, se subraya en el texto que el imperativo ético y político de "la necesidad del otro" debe guiar la acción de todos los ecuatorianos. El bienestar común no debe ser una simple frase de campaña ni un eslogan publicitario, sino una verdadera prioridad que se traduzca en políticas públicas eficaces y humanas. Esta es la oportunidad de votar con conciencia, no solo por intereses particulares, sino por el bien colectivo de la nación.

El llamado al diálogo y a la colaboración
Uno de los puntos más destacados del comunicado es el llamado al diálogo. Los obispos subrayan la importancia de un diálogo ético y empático con quienes piensan diferente. Este es un llamado a no caer en la tentación de repartir el poder ni de buscar prebendas a cambio de votos, sino a practicar un "nosotros" inclusivo, que contemple a todos los sectores de la sociedad. El arte de gobernar, afirman, debe ser la renuncia al "yo" individual y la apertura al bien común.

Es fundamental, según la Iglesia, que los nuevos gobernantes asuman su rol con un espíritu de servicio, sin mesianismos totalitarios ni la intención de perpetuarse en el poder. La política, como se señala en el comunicado, debe estar orientada hacia el bien común, fundamentada en principios de justicia, equidad y solidaridad.

El proceso electoral debe ser entendido como una fiesta democrática, una oportunidad para renovar el compromiso con la democracia, el respeto al Estado de Derecho y la alternancia en el poder. En este contexto, la Iglesia espera que los resultados electorales sean reconocidos con respeto, garantizando que cada voto sea contado y respetado. Además, los pastores solicitan que tanto los vencedores como los vencidos acepten la voluntad de la mayoría, comprometiéndose a trabajar por un Ecuador mejor, en unidad y armonía.

La transformación de la realidad del país no será posible sin una transformación interna de cada ecuatoriano. Por ello, el mensaje de la Iglesia resalta la importancia de la renovación del corazón, la empatía y la solidaridad como motores de cambio. Este proceso electoral es también una oportunidad para abrir el corazón al bien común y responder a la necesidad de un Ecuador más justo y equitativo.

El comunicado concluye con un llamado a la oración. En las celebraciones eucarísticas del 13 de abril, que coinciden con el Domingo de Ramos, el pueblo ecuatoriano es convocado a elevar una plegaria ferviente "por este país que tanto amamos".

"Votemos con esperanza, miremos hacia adelante y, así, expresemos nuestro compromiso por un Ecuador mejor en libertad y democracia", finalizan los pastores.+