En su discurso a los participantes en la "Conferencia de todas las religiones", el Papa Francisco destacó el valor del diálogo en un contexto global marcado por la "intolerancia y el odio".
El Papa recordó que "ninguna vida debe ser descartada", y pidió "cercanía, compasión y ternura". Fue al recibir a una delegación del Departamento de Odontología de la Universidad de Nápoles.
El Papa se lo recordó a los miembros de la Comisión Teológica Internacional, al recibirlos en audiencia. "El amor de Cristo es una llamada a construir la paz y la justicia", profundizó.
Francisco se reunió con miembros del canal "El Sembrador Nueva Evangelización", a quienes les agradeció su obra evangelizadora y los animó a continuarla.