El obispo de Río Cuarto presidió, el 20 de junio, la misa en honor de Nuestra Señora de la Consolata en la explanada de la recién declarada basílica menor de Sampacho.
El arzobispo consideró que hay mucho por aprender del santo patrono y destacó: "Él sabe reorientar los corazones y canalizar las búsquedas más importantes de los anhelos profundos".
El obispo de San Isidro recordó la necesidad de "ir a la otra orilla con confianza" para evangelizar y recordó que no hay misión sin "dejar las seguridades de la orilla que conozco para ir a la otra".
El arzobispo recordó que "todo momento es propicio para reconciliarnos con el Padre y con todos los hombres" y afirmó: "Cristo es la causa de esta reconciliación urgentemente reclamada".