Para obispos estadounidenses, es "inconcebible" que se apruebe el infanticidio
- 8 de febrero, 2019
- Washington (Estados Unidos)
"El Senado de Estados Unidos tuvo la oportunidad de declarar unánimemente a la nación que el infanticidio es objetivamente incorrecto. Que no lo haya hecho es inconcebible", advirtió el presidente del Comité de Actividades Provida de la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (Usccb), monseñor Joseph Naumann, al lamentar que no se haya aprobado una ley que garantizaría la defensa de la vida de los bebés que sobreviven a un aborto.
El lunes 4 de febrero el Senado de Estados Unidos no aprobó la Ley de Protección a los Sobrevivientes del Aborto Nacidos Vivos, una norma que garantizaría que un bebé nacido vivo después de un aborto reciba el mismo grado de cuidado que cualquier otro.
La norma tuvo el apoyo de los republicanos pero el rechazo de los demócratas.
"El Senado de Estados Unidos tuvo la oportunidad de declarar unánimemente a la nación que el infanticidio es objetivamente incorrecto. Que no lo hayan hecho es inconcebible", afirmó monseñor Naumann en una declaración dada a conocer por el sitio web de la Usccb.
El prelado sostuvo que ningún recién nacido debe ser dejado morir sin atención médica. "Es bárbaro e implacable dejar a estos bebés vulnerables sin ningún tipo de cuidado o derechos", agregó.
El proyecto de ley establecía que "cualquier profesional de la salud que esté presente" al momento del nacimiento tras un aborto fallido, "debe ejercer el mismo grado de profesionalismo y diligencia para preservar la vida y la salud del niño, del mismo modo que haría con cualquier otro niño nacido vivo a la misma edad gestacional".
También indicaba que el profesional de la salud "debe asegurarse que el niño nacido vivo sea inmediatamente llevado y admitido en un hospital".
Esta precisión se hace considerando que las clínicas de aborto, donde el procedimiento suele ser el quirúrgico, no suelen tener otro tipo de atención distinta a las relacionadas con esta práctica. Además, en algunas solo proporcionan los fármacos que inducen al aborto y anticonceptivos.
El proyecto rechazado proponía que si un profesional de la salud ignoraba estas medidas, podría afrontar cargos penales.+