Numerosas personas participaron del Encuentro Regional para Misioneros en La Plata
- 25 de junio, 2024
- La Plata (Buenos Aires) (AICA)
Con el lema 'Vayan e inviten a todos al banquete', el encuentro se desarrolló en el colegio Inmaculada. La misa de inicio fue presidida por uno de los obispos auxiliares, Mons. Jorge González.
Un grupo numeroso de personas de los diversos movimientos misioneros de la arquidiócesis de La Plata y de diócesis vecinas participaron del Encuentro Regional para Misioneros, impulsado por el equipo de Animación Misionera, que se desarrolló el jueves 20 y el viernes 21 en el colegio Inmaculada.
El encuentro se inició con una charla de bienvenida del equipo coordinador y luego se desarrolló la procesión, denominada 'Seamos luz para Argentina', hasta la catedral, donde uno de los obispos auxiliares de la arquidiócesis, monseñor Jorge González, celebró la misa de apertura. La concelebraron el asesor del equipo de Animación Misionera, presbítero Juan José Olivetto, el presbítero Santiago Rocca y otros sacerdotes.
En sus palabras a los participantes del encuentro, que estuvo acompañado con el lema 'Vayan e inviten a todos al banquete', monseñor González manifestó: "Que bien nos hace compartir como región pastoral este tiempo de reflexión, de diálogo, de celebración conjunta de la fe y, ante todo compartir esta vocación y este llamado a la misión. Ojalá que estos días sean intensos y de verdadera renovación espiritual, de entusiasmarnos profundamente en el envío de Jesús con la fuerza de su Espíritu".
A la luz de las lecturas del día y también tomando la figura del profeta Elías, el obispo recordó que el misionero "es aquel que enciende en su corazón el fuego del Espíritu y es aquel que quiere encender este fuego también en los demás".
"Estos días tienen que ser días también de volver a encender en nosotros el fuego del Espíritu, porque no hay misión sin el empuje y sin la fuerza del Espíritu. La misión no es obra nuestra ni de nuestras planificaciones, sino que siempre es docilidad al Espíritu Santo, que guía, conduce, sostiene, consuela, levanta y anima", agregó.
Por otra parte, se refirió a lo que el Papa Francisco define como 'parresía', que "tiene que ver con el alma del misionero; don que tenemos que pedir y experiencia que tenemos que trabajar y educar en nuestros corazones, para poder vivir la misión al estilo de Jesús, al estilo de lo que Jesús también suscitó en sus discípulos".
"Por eso -dijo-, me parece que la figura de Elías nos pone frente a esta búsqueda de vivir la misión con parresía; también, de despertar el Espíritu misionero en nosotros, en este fuego que tiene que arder en nuestros corazones y con el cual queremos vivir la misión".
Finalmente, recordó a la Virgen María como la "gran misionera", y afirmó que "nuestra vida de misión y nuestro estilo misionero no puede no ser un estilo mariano". "María se puso en camino; la urgencia es fundamental en el ímpetu misionero, esa urgencia que nos empuja a compartir lo que hemos recibido, la urgencia de extender el reino", enfatizó.
El encuentro continuó el viernes 21 con diversas actividades, trabajos en grupo, puestas en común, momentos de oración y reflexión sobre la actividad misionera, rezos del rosario y almuerzo en comunidad, y finalizó con las conclusiones y la misa de clausura.+