Monseñor Canecín, a los docentes: 'Educar pensando en la esperanza'

En el Día del Maestro, el obispo de Goya celebró una misa de acción de gracias en la catedral Nuestra Señora del Rosario por la tarea educativa de los docentes.

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Canecín, celebró el miércoles 11 de septiembre, en la catedral diocesana, una misa de acción de gracias por el Día del Maestro.

En la homilía, el prelado recordó a los educadores presentes que, "desde el bautismo, todos los bautizados participamos del ministerio de la docencia, todo bautizado es maestro, sacerdote y pastor; entonces, todos participamos del ministerio docente de Jesucristo", señaló.

"Este día pega fuerte en nuestro corazón y despierta la memoria agradecida de nuestros primeros maestros. Yo tengo gratísimos recuerdos de quienes fueron mis maestras, primero en la zona rural y después, en lo que era en ese entonces el pueblo de Formosa", sostuvo.

Durante la celebración, monseñor Canecín tomó la Parábola del Sembrador, en la que "Jesús enseña que, sea cual fuere el tipo de tierra, el sembrador siembra". "Ustedes, docentes, saben que, entre los que llegan a la escuela, podemos encontrar los distintos tipos de tierra, y cada uno de ustedes realizan el esfuerzo para integrar a los distintos alumnos, para ofrecer a todos la misma posibilidad y oportunidad", dijo.

"Esta parábola -subrayó- nos enseña que siempre tenemos que enseñar, sea cual fuere el tipo de tierra que encontremos en el camino de la vida. Eso es ser docente. Eso es ser maestro", alentó, al tiempo que aseguró que la "semilla de la enseñanza y de la educación, en su momento ,dará frutos. Va a depender de la tierra, la mente, el corazón, los dones naturales, las capacidades, la auto-disposición de cada una de las personas que van a estudiar".

Además, destacó que el sembrador "no se detiene ni se desanima, porque a veces se encuentra con una tierra al borde del camino o entre piedras, sino que debe perseverar, porque tiene una misión que brota de la vocación. El docente se siente llamado a servir por aquel que es el Maestro".

Entonces -prosiguió-, "inspirados en Jesús, que los maestros no se cansen, saquen iniciativas, creatividades y busquen siempre la manera de enseñar, valiéndose siempre de recursos pedagógicos ,que brotan a borbotones en la mente y el corazón, porque tienen la ciencia del amor que los vuelve apasionados en la siembra".

Instó también a "agradecer a Dios por la vocación, sentir que es una verdadera vocación y tratar siempre de contagiar, para que no sea solo una cuestión economicista", deseando igualmente que "sean cada vez mejor retribuidos por sus esfuerzos: sabemos las luchas que existen en ese sentido, pero la vocación hace que uno supere cualquier adversidad. Luchen por sus derechos, pero nunca resignen la tarea de educar. ¡Qué hermoso es educar pensando en la esperanza!".

Finalmente, el obispo pidió a Jesús, "Camino, Verdad y Vida, que siga animándolos en la entrega diaria y les conceda las gracias materiales y espirituales que necesitan en este tiempo, para seguir enseñando".+