Mons. Colombo llamó a ser una Iglesia "misionera y alegre servidora del Evangelio"

Más de 600 personas participaron el sábado 16 de marzo en Mendoza de la Jornada "Juntos Caminamos", que tuvo como lema "Llamados a ser Iglesia que escucha a Dios y a su pueblo para servir con alegría el Evangelio", y que contó con la presencia del arzobispo, monseñor Marcelo Colombo.

Con el lema "Llamados a ser Iglesia que escucha a Dios y a su pueblo para servir con alegría el Evangelio", se llevó a cabo el 16 de marzo en el colegio Sagrado Corazón, de Mendoza, la Jornada "Juntos Caminamos", que congregó a más de 600 personas entre sacerdotes, religiosos, diáconos y laicos, acompañados por el arzobispo, monseñor Marcelo Colombo.

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Desde las 8.30, mientras los asistentes terminaban de registrarse, jóvenes músicos hicieron "la previa" entonando cantos de alabanza. El ánimo festivo no acabó cuando, a las 9, comenzó el acto con un mandato que provocó sonrisas y aplausos entusiastas en el público: "Si tienes al Señor, ¡Que se te note!". Luego, el presbítero José Martín dio la bienvenida, destacando: "Ahora damos inicio a un camino de reflexión conjunta", y añadió: "Para ser Iglesia más que hacer Iglesia".

Posteriormente, el sacerdote dio la bienvenida a la imagen de la Virgen del Rosario, patrona de Mendoza, con cantos interpretados por el grupo musical y coreados por el público. Le siguió la imagen del padre José Gabriel del Rosario, el Santo Cura Brochero y, detrás de él, un cuadro con la imagen de los Mártires de La Rioja, en proceso de beatificación.



A continuación, se mostró un video con un breve repaso de los arzobispos que tuvo Mendoza; las acciones llevadas en cuanto a la Nueva Evangelización y, posteriormente, con Aparecida, el sentido de ser discípulos misioneros.

Monseñor Colombo se dirigió a la asamblea explicando el sentido del lema "Juntos caminamos", y una palabra que se repetiría a lo largo de su discurso, sinodalidad, -lo que el papa Francisco define como "dimensión constitutiva de la Iglesia"-. El prelado anticipó: "Hoy no hay líneas pastorales ? las vamos a hacer juntos, entre todos, con la ayuda del Espíritu, iluminados por su palabra".

"Nada sin ustedes, los necesitamos a todos para pensar juntos cómo anunciar al Señor, cómo testimoniarlo, hacerlo vivo en nuestras comunidades", expresó. En ese sentido, pidió a todos sentirse portadores de una misión y participar comprometidamente en los grandes temas pastorales.

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El arzobispo destacó también, como eje fundamental, la necesidad del discernimiento, en forma individual y con la guía del pastor. Manifestó que, aún con una Iglesia arrinconada actualmente por la hostilidad de una sociedad secularizada, sueña con que ésta "se inserte en las periferias y sea misionera y alegre servidora del Evangelio".

"Los pobres son nuestros preferidos, no por una opción sociológica, no por una ideología perecedera sino por aquella invitación de Jesús: Tuve hambre, tuve sed, estuve de paso, preso, enfermo, desnudo; conceptos que no han perdido vigor. Estamos invitados a seguir proponiendo y resignificando nuestra presencia. Vamos a dar espacio a todos, vamos a invitar a todos", concluyó, dando cierre al primero de los tres módulos que se desarrollaron durante la jornada, en la que se compartieron trabajos y experiencias muy ricas para la comunidad.+