Los obispos de Costa Rica recuerdan la herencia católica en la identidad del país
- 14 de septiembre, 2021
- San José (Costa Rica) (AICA)
"Son herencia católica la defensa de la libertad y de los derechos", afirman los prelados en su mensaje con motivo de la celebración del bicentenario de la independencia patria.
La Conferencia Episcopal de Costa Rica (CECOR) emitió un mensaje, en el que hicieron un análisis de la situación del país con motivo del Bicentenario de la Independencia, que “nos permite, con humildad y con gratitud a Dios, redescubrir las luces que se han manifestado con claridad a la largo de nuestra historia”.
El texto, de 17 páginas, fue presentado por el presidente de la CECOR, monseñor Manuel Garita quien destacó algunos de los logros del país, empezando por la propia independencia en 1821, la guerra de 1856, el impulso de la educación, el acuerdo nacional en los años 40 para asumir las garantías sociales. También habló del acuerdo de paz al abolir el ejército en 1948.
El obispo destacó la presencia de la Iglesia católica a lo largo de estos años junto a figuras sociales que son reconocidas en la historia de Costa Rica.
En este contexto histórico fue “fundamental el papel de la devoción a Nuestra Señora de los Ángeles que, desde su hallazgo en Cartago en 1635, fue referente del ser nacional y punto de confluencia de todos los costarricenses”.
El mensaje agrega como herencia católica la defensa de la libertad y derechos de los indígenas y de los afrodescendientes, la abolición de la pena de muerte, el valor de la vida, el rechazo al aborto y a la eutanasia, el cuidado del medio ambiente entre otras.
Además recuerda que “Costa Rica compartió con las demás naciones centroamericanas su experiencia de diálogo, paz y concordia, cuando en los años ochenta del siglo pasado llevó el liderazgo en los acuerdos de paz que acabaron con las cruentas guerras que azotaban la región”.
Monseñor Garita destacó los esfuerzos que se realizaron para responder a la emergencia por el Covid-19. A pesar de esto, señalan algunos retos que tiene el país.
Los obispos reconocen que aún están lejos de vivir todo lo que predican a la vez que piden perdón por las faltas y limitaciones; agregan que quieren no solamente ayudar a los demás en su conversión, sino también convertirse juntamente con ellos, de forma que las diócesis, parroquias, instituciones, comunidades, congregaciones religiosas, lejos de ser obstáculo sean un incentivo para vivir el Evangelio.
El representante de la Iglesia en Costa Rica aseguró que en la sociedad actual quiere ser una opción más de diálogo en medio de la realidad que se vive.
Por tanto “damos gracias a Dios, pues aún en medio de luces y sombras propias de la realidad humana, dado el contexto de esos momentos, la Iglesia católica estuvo presente en cada uno de ellos con un papel proactivo, como agente constructor y constitutivo de la nacionalidad costarricense”.
Finalmente cierran el mensaje encomendando al país a la Virgen de los Ángeles, Patrona de Costa Rica.
El texto completo del mensaje puede leerse aquí.+