Jueves 14 de noviembre de 2024

La Iglesia en Francia crea un Tribunal Penal Canónico para casos graves de abusos

  • 10 de noviembre, 2022
  • Lourdes (Francia) (AICA)
El presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, anunció la creación de una nueva instancia judicial para "restablecer la confianza" en la Iglesia.
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Con la conmoción todavía presente tras el anuncio de que el cardenal Jean-Pierre Ricard, arzobispo emérito de Burdeos, abusó de una menor hace 35 años y que otros 10 prelados franceses están siendo juzgados por casos similares; monseñor Éric de Moulins-Beaufort, actual presidente de la Conferencia Episcopal Francesa, anunció que en diciembre entrará en funcionamiento el Tribunal Penal Canónico Nacional.

En su discurso final de la Asamblea Plenaria del episcopado francés, clausura en Lourdes el 8 de noviembre, monseñor Moulins-Beaufort, tras hacer un “mea culpa” de los obispos franceses por la manera “cerrada, entre obispos”, por “la ingenuidad” demostrada y por la “falta de consideración hacia el pueblo de Dios”, comunicó a la opinión pública que el episcopado aprobó dos iniciativas: por un lado, la creación de “una comisión de seguimiento a la que se remitirá cualquier arzobispo u obispo que tenga que tratar el caso de otro obispo por abusos o agresiones sexuales”. Dicha comisión estará presidida por “una persona cualificada y reconocida” y sus miembros serán nombrados por la Comisión Permanente. Y por otro lado, el estudio de la implantación de una “credencial nacional”, una “tarjeta que se entrega a cada sacerdote para acreditar su calidad y su capacidad para celebrar los sacramentos”. 

La Plenaria votó también los estatutos de un Tribunal Penal Interdiocesano que deberá quedar constituido a principios de diciembre, “en cuanto reciba el visto bueno del Tribunal de la Signatura Apostólica”.

“No hay, ni puede haber, impunidad para los obispos. Por la propia naturaleza de su oficio apostólico, los obispos dependen directamente de la Santa Sede. Los procedimientos que les afectan son más complejos y llevan más tiempo. Nos comprometemos a trabajar con la Santa Sede para aclarar y simplificar estos procedimientos. Hemos decidido crear un Consejo de Seguimiento que nos permita no enfrentarnos a estas situaciones solos y entre nosotros”, dice al respecto una declaración aprobada al final del encuentro.

Los obispos vuelven a reafirmar su compromiso de hacer de la Iglesia un hogar más seguro. “Más que nunca -dice la declaración publicada en la clausura de la Asamblea-, las víctimas siguen siendo el centro de nuestra atención. Sus expectativas y demandas son legítimas y realmente escuchadas. Los acogemos como si vinieran del mismo Señor”. El presidente de la CEF, no obstante, reconoce: “El camino para sanar los trastornos, la ira y las preocupaciones será largo”.+