Viernes 15 de noviembre de 2024

La diócesis de Rawson recordó al misionero Bartolomeo Poggio

  • 24 de noviembre, 2023
  • Rawson (Chubut) (AICA)
A través de un videomensaje, el obispo electo de la jurisdicción, Mons. Roberto Álvarez, destacó que ese evangelizador de la Patagonia "vino de afuera para servir y acompañar".
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El obispo electo de Rawson, monseñor Roberto Álvarez, compartió un videomensaje por la fiesta del beato y protomártir de la Patagonia, Bartolomeo Poggio, que la Orden Mercedaria celebra anualmente cada 23 de noviembre. 

“Alguien de afuera, alguien que vino de afuera como tantos otros, que reconocen ese afuera en sus papás o en sus abuelos. Vino para servir, no para servirse ni de esta tierra ni de la gente. Vino para acompañar y, por razones históricas, terminó acorralado y muerto mientras celebraba la misa”, recordó el prelado

Y agregó: “Queremos pedirle a Bartolomeo que todos los que se sienten solos, todos los que se sienten amenazados, los que alguna noche oyen ruido, un tiro en un barrio periférico, o lo que sea, puedan clamar al cielo para que él los ayude y para que nadie más pase lo que él pasó”.

Bartolomeo Poggio nació en Italia en 1768 y, siendo un niño, viajó con sus padres al actual territorio argentino. Una vez instalado en Buenos Aires, decidió ingresar en la Orden de la Merced, luego de lo cual fue ordenado sacerdote en la ciudad de Córdoba, el 26 de mayo de 1799. Al siguiente año fue destinado a la Patagonia, como capellán en el Fuerte y Puerto de San José de la Candelaria, en la actual provincia Chubut.

Desarrolló su tarea apostólica durante diez años en aquella región de la Península de Valdés, hasta entregar su vida, cuando fue incendiada la capilla en la que estaba celebrando misa. En este hecho, ocurrido el 7 de agosto de 1810 y en el que Bartolomeo falleció martirizado, murieron también 15 personas y otras fueron esclavizadas. Desde entonces, la Orden de la Merced celebra su vida cada 23 de noviembre. 

El beato mercedario fray Bartolomé Poggio es muy querido en las comunidades patagónicas y su ejemplo de vida, de servicio, pobreza y entrega misionera ha sido reconocido mediante la imposición de su nombre a diferentes barrios, plazas, centros barriales de ayuda social y lugares de culto.+