'La caridad concreta es expresión del camino del amor que queremos transitar', expresó Mons. Martínez
- 15 de marzo, 2023
- Posadas (Misiones) (AICA)
El obispo de Posadas reflexionó, en su carta para el tercer domingo de Cuaresma, sobre las variantes de la caridad concreta y la necesidad de hacer examen acerca de nuestra moral social.
En su carta a propósito del tercer domingo de Cuaresma, el obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, se centró en las formas que puede adquirir la “caridad concreta y en la necesidad de un examen de consciencia más profundo, que tenga en cuenta la dimensión social de la moral.
Luego de referirse a la colecta diocesana “del 1%” -realizada este mismo domingo- como “un gesto concreto de caridad y justicia”, el prelado señaló que, precisamente, esa “caridad concreta es expresión del camino del amor que queremos transitar en esta Cuaresma”.
A continuación, y después de aludir -como el domingo anterior- a la encíclica Deus caritas est del papa Benedicto XVI, el diocesano recordó que “el tiempo cuaresmal nos puede ayudar a revisar cómo vivimos nuestro discipulado del amor”.
En ese sentido, precisó: “Debemos procurar captar si el don de Dios, de su amor, y la capacidad que tenemos de amar por nuestra condición de ser personas y haber sido hechos a imagen y semejanza de Dios, nos orienta hacia un amor que se dona y que considera a los otros como sujetos, y no como meros objetos de uso y consumo”.
En efecto, el obispo posadense aseveró que “es común que en los confesionarios abunden los pecados ligados a la sexualidad y que, sorprendentemente, no se tenga demasiada conciencia de los pecados ligados a la dimensión social de la fe, a la avaricia del tener y el poder, y a tantas situaciones de corrupción que todos sabemos que son un flagelo en nuestra sociedad y son causa de tantos males”.
Al respecto indicó: “Esto revela la necesidad de profundizar en la formación cristiana de una mayor enseñanza de la doctrina social de la Iglesia y obviamente de la moral social”.
Y, para terminar, señaló que, “revisando el discipulado del amor, entendemos que es fundamental que experimentemos el amor de un Dios que es Padre y que nos ama, y permite reconocernos como hijos y hermanos”.+