Jueves 14 de noviembre de 2024

En la fiesta patria, el arzobispo de Asunción instó a una 'profunda transformación moral'

  • 15 de mayo, 2023
  • Asunción (Paraguay) (AICA)
El cardenal Adalberto Martínez presidió, este domingo 14 de mayo, el tedeum en la catedral con motivo del 212º aniversario de la independencia del Paraguay.
Doná a AICA.org

El arzobispo de Asunción del Paraguay, cardenal Adalberto Martínez, presidió este domingo 14 de mayo el tedeum realizado por el 212º aniversario de la Independencia del país y, en su mensaje de esa jornada, se enfocó en las elecciones generales que se desarrollaron el 30 de abril pasado, frente a los reclamos realizados en la calle acerca de un supuesto fraude electoral.

Participaron de la ceremonia religiosa el presidente de la República, Mario Abdo Benítez, y su esposa, Silvana López Moreira; también estuvieron presentes otras autoridades nacionales, y representantes del Poder Legislativo y del Ministerio Público.

“Necesitamos promover la transparencia absoluta del proceso electoral”, resaltó el cardenal paraguayo. Sobre este punto, expresó que los obispos del Paraguay lo consideran esencial para la legitimidad del origen de las nuevas autoridades y que posibilitará la gobernabilidad y la paz social.

“En este sentido, exhortamos a los organismos competentes que provean y expongan toda la información que permita generar confianza y tranquilidad sobre la limpieza del proceso eleccionario y que despejen toda duda”, enfatizó.

El arzobispo de Asunción también hizo hincapié en que la Patria “necesita una profunda transformación moral”. Incluso, en otros momentos del mensaje señaló que “los gobernantes no deben usar su poder para favorecer solo a su grupo político o a un sector económico”.

También advirtió que, aquellos que “no se dan el tiempo de comprender las advertencias” por sus “acciones políticas”, “escucharán hablar a quienes hasta hace poco hablaban poco o solo entre ellos o callaban, aparentemente, los sufrimientos y las injusticias”.

“Y hablarán, gritarán, vociferarán sus dolores, y ni las balas podrán detenerlos, como ya ha ocurrido en la historia reciente de nuestro país. Y ahí, entonces, poco servirán los títulos, los cargos y honorabilidades de quienes ignoran neciamente los sufrimientos de la gente”, remarcó.

Mensaje a los cristianos del Paraguay
Con motivo de la fiesta patria, el cardenal Martínez Flores, dirigió un mensaje a sus conciudadanos, titulado: “La paz verdadera es fruto de la justicia”.

“Es un honor y un compromiso rendir homenaje a la Patria en el 212º aniversario de la Independencia nacional, que nos remite a una historia de heroísmo y sacrificio, de grandes epopeyas y vicisitudes; que nos proyecta hacia este presente de desafíos; que nos exige realizar los mejores esfuerzos, desde todos los sectores sociales, económicos y políticos, y de la misma Iglesia del Señor Jesús, para la construcción de la gran patria que soñamos y nos merecemos”

Así se lee en el primer párrafo del amplio documento, en el que se manifiesta que, “para la gestión mancomunada del bien común, se necesitará de la paz y de la reconciliación”. Y se añade que “el profeta Isaías nos recuerda que la verdadera paz será fruto de la justicia”.

Tras afirmar que “Isaías es el profeta de la esperanza a través de su visión mesiánica”, el prelado manifestó: “Podemos imaginarnos que esos días mejores es lo que habrán soñado también nuestros héroes patrios, que se animaron a desafiar el yugo de un reino que ya no les garantizaba la justicia ni el derecho”.

Y a continuación se preguntó: “¿Cómo sería ese nuevo reino donde Dios estaría con nosotros? ¿Cómo debe ser el gobierno de ese país que dice que defiende la causa de Dios, es decir el derecho y la justicia?”

Entre otros conceptos, también agregó: “Ciudadanos y gobernantes, todos quienes quieran escuchar palabras de sabiduría, orientación y consuelo en su desempeño cotidiano, debemos escuchar las palabras del profeta Isaías, que mantienen su frescura y el vigor de la verdad, que sólo alguien iluminado por el Espíritu del Señor puede tener”.

No es fácil complacer a todos, lo sabemos bien. Estando en el servicio público, con el poder conferido en las urnas, decimos que queremos escuchar a la gente. Al respecto, otra característica del gobernante que describe el profeta es la capacidad de ver y escuchar: “No se cerrarán los ojos de los videntes, y los oídos de los que escuchan percibirán”.

El que tenga oídos que oiga
“El mismo Jesucristo ya lo había sentenciado claramente: ‘El que tenga oídos que oiga’ (Mt 13, 9). El ver y escuchar en el lenguaje de Jesús es más profundo que ver y escuchar los reclamos y sufrimientos de la gente solamente, sino que se trata de entender los signos de los tiempos, lo que implican hoy y para el futuro esos reclamos, no sólo para la gente, sino para la existencia del propio Estado”.

“Estemos atentos a las voces, a las señales de los tiempos. Por la historia sabemos que países, líderes y ciudadanos que no supieron escuchar las señales de los tiempos, terminaron sucumbiendo por su soberbia”.

Y, para lograr aquel objetivo, “es necesario fortalecer la institucionalidad y garantizar la independencia del Poder Judicial, del Ministerio Público, de la Contraloría General y de la Dirección de Contrataciones Públicas, entre otros órganos de la República”.

 “Son impostergables las reformas estructurales, para enfrentar con eficiencia y eficacia la inequidad social y económica”, continuó. Y se destaca que “el objetivo es que la población pueda acceder a servicios básicos de calidad en salud, educación, infraestructura, entre otros, y a condiciones y oportunidades para una vida digna y plena”.

“En esta conmemoración de la Independencia nacional, invito a todos los sectores y actores políticos, sociales, económicos, culturales y a todas las iglesias, que pongamos el mayor empeño para que en nuestra patria, la República del Paraguay, reinen la justicia y la equidad, la seguridad y la paz, la abundancia y la confianza entre nosotros”.+