Europa se une en una cadena de oración por las víctimas de la pandemia
- 16 de febrero, 2021
- San Galo (Suiza) (AICA)
Durante la Cuaresma, las conferencia episcopales europeas se comprometieron a celebrar misas y plegarias por las más de 770.000 personas que murieron en el continente a causa del Covid-19.
Los presidentes de las conferencias episcopales del continente europeo invitan a rezar por las víctimas de la pandemia desde mañana, Miércoles de Ceniza, y durante todo el tiempo de Cuaresma.
Los obispos europeos unen una vez más su voz a la del papa Francisco para reiterar la cercanía de la Iglesia a los que luchan por el coronavirus: las víctimas y sus familias, los enfermos y los trabajadores de la salud, los voluntarios y todos los que están en primera línea en este delicado momento.
En el marco de la Cuaresma, presentaron una red de oración, una cadena eucarística, para las más de 770.000 personas que murieron en Europa a causa del Covid-19.
“Hemos evaluado juntos la oportunidad, es más el deber de recordar en la santa misa a las víctimas, a las muchas víctimas de la pandemia", expresó el cardenal Angelo Bagnasco, presidente de la CCEE al presentar esta iniciativa.
"Cada conferencia episcopal de Europa se comprometió a organizar al menos una misa: será como crear una cadena de oración, una cadena eucarística en la memoria y en el sufragio por muchas personas. En esta oración también queremos recordar a las familias que han sufrido el duelo y a todos aquellos que todavía están afectados por la enfermedad en este momento y corre peligro su vida”, sostuvo.
La iniciativa, que involucrará a todas las conferencias episcopales de Europa según un calendario preciso, pretende ofrecer un signo de comunión y esperanza para todo el Continente.
“Los obispos de Europa estamos todos unidos junto a nuestro comunidades, nuestros sacerdotes, agradecidos a todos los que siguen dedicándose a los más necesitados, para apoyar su compromiso con nuestra palabra y sobre todo con nuestra oración para que podamos mirar juntos hacia un futuro mejor”, aseguró el cardenal Bagnasco.+