En Catamarca, miembros del poder ejecutivo provincial y municipal homenajearon a la Virgen
- 20 de abril, 2023
- San Fernando del Valle de Catamarca (AICA)
De la misa del martes en honor de la Madre Morena del Valle celebrada por el obispo Urbanc, participaron el gobernador Raúl Jalil y el secretario de gobierno municipal, Fernando Monguillot.
El martes 18 de abril, tercer día del Septenario en honor de la Virgen del Valle, le rindieron su homenaje a la Madre Morena representantes del poder ejecutivo provincial y municipal de Catamarca, durante la misa central presidida por el obispo diocesano, monseñor Luis Urbanc, en la catedral basílica y santuario mariano.
Participaron de la celebración litúrgica el gobernador, licenciado Raúl Jalil, acompañado de algunos de sus colaboradores, entre ellos el secretario de gabinete del gobierno provincial, Guillermo Eduardo Dalla Lasta; el ministro de Gobierno, Justicia y Derechos Humanos de Catamarca, CPN Juan Cruz Miranda; y el de Agua, Energía y Medio Ambiente, CPN Lucas Zampieri. Asimismo, estuvo también presente el secretario de Gobierno y Coordinación de la Municipalidad de la capital, Dr. Fernando Monguillot, entre otros funcionarios.
En su homilía, el obispo comenzó rogando, por los gobernantes de la ciudad y de la provincia, para que "la Madre celestial los cubra con su manto y acompañe en el desempeño efectivo y fiel de sus respectivas funciones”.
A continuación, afirmó que “la tarea misionera es la que enciende por primera vez el fuego de la fe en una persona o en un pueblo. La Iglesia es consecuencia de la misión, no causa”, y agregó: “No hay cristiano sin Iglesia, de la misma forma que no hay discípulo sin ser misionero”.
Asimismo, subrayó que “la misión está dirigida a la propia comunidad católica, para que se redescubra como colectividad viva y atractiva. También se dirige a los católicos bautizados pero alejados de la Iglesia, y a las clases dirigentes que se desenvuelven en los diversos espacios sociales, políticos, culturales y económicos de la sociedad”. Y añadió que “con la misión se pretende llegar incluso a las personas indiferentes, que viven en los ámbitos socioculturales en los que Jesucristo por lo general está ausente”.
En otro tramo, el obispos catamarquño expresó que, “para los apóstoles y demás discípulos, creer en Jesús supuso un cambio importante en su vida. Por una parte su vida se llenó de sentido. La esperanza iluminó sus corazones. Pero, por otra parte, se vieron obligados a cambiar sus valores, su forma de entender la vida, sus relaciones con las demás personas. Desde Jesús todo cobraba un sentido nuevo”.
Y exhortó a que “de ellos tomemos la valentía para afrontar las nuevas situaciones, tratando de dar una respuesta cristiana a los desafíos. Procuremos no dejarnos llevar por el ‘siempre se hizo así’, de ser críticos con nosotros mismos y con nuestra historia, de no dar nada por supuesto y de buscar siempre inspiración en el Evangelio, que es el mismo Jesús, Muerto y Resucitado, para seguir pasando a las futuras generaciones la llama del Evangelio en toda su fuerza y pureza”.
Finalmente, monseñor Urbanc pidió a la Madre del Valle: "Ayudanos a aceptar la exigencia de tu Hijo Jesús de que debemos nacer de nuevo, y que hagamos el esfuerzo por lograrlo día a día por medio de la oración asidua, la caridad para con nuestros prójimos, la cercanía con los que sufren por diversas causas, la honestidad en nuestro obrar, la docilidad a las enseñanzas divinas, el cultivo de las virtudes cristianas y siendo artífices de la paz”.+