El Papa elogió la labor valiente y profética de los eruditos ecuménicos
- 14 de septiembre, 2023
- Ciudad del Vaticano (AICA)
Francisco se reunió con los participantes del 26º Coloquio Ecuménico Paulino, a los que instó a tener confianza en las promesas de Dios como base para fomentar el diálogo ecuménico.
El Papa Francisco elogió el trabajo de un grupo ecuménico de eruditos dedicados a las cartas de San Pablo, explicando que su “gran contribución” es “el encuentro entre cristianos diversos entre sí, pero unidos por la sabiduría de la enseñanza paulina”.
En un discurso a los participantes en el 26º Coloquio Ecuménico Paulino, el Santo Padre también destacó el “intercambio exegético riguroso y erudito” entre académicos, que permite que “emerja la belleza de las cartas del Apóstol y su importancia para la vida cristiana y eclesial”.
El Obispo de Roma calificó la iniciativa de "valiente", para superar “las barreras de la actitud defensiva”; y también de "profética", al promover una “sana 'impaciencia del Espíritu'” por la plenitud de la unidad y el compromiso de dar testimonio.
“Si a lo largo de la historia las divisiones han sido fuente de sufrimiento”, dijo, “hoy debemos comprometernos a invertir el rumbo, avanzando por los caminos de la unidad y la fraternidad, que comienzan precisamente con la oración, el estudio y el trabajo juntos”.
Observando que los participantes del Coloquio se centran en los capítulos 9 a 11 de la Carta de san Pablo a los Romanos, el Papa destacó los dones “irrevocables” y el llamado de Dios descritos, justamente, en Romanos 11,29.
Aquí, dijo, san Pablo nos transmite un mensaje de fundamental importancia: "Dios no falla en sus promesas de salvación y las cumple con paciencia, incluso por caminos inesperados y sorprendentes".
El Santo Padre aseguró que su apoyo al trabajo del Coloquio se basa, precisamente, en el fundamento de nuestra confianza en “la misericordia y las promesas de Dios”. Al tiempo que animó a los participantes a continuar su diálogo fraterno y académico, los invitó también, “sobre todo”, a dejarse “asombrar por los innumerables recursos espirituales contenidos en las cartas paulinas, para ofrecer a las comunidades cristianas 'nuevas palabras', capaces de comunicar la bondad misericordiosa del Padre, la novedad de la salvación de Cristo y la esperanza renovadora del Espíritu”.
Concluyó con la esperanza de que su trabajo sobre san Pablo pueda fomentar “el espíritu ecuménico” entre los creyentes, como ayuda a “nuestro camino común de búsqueda del Señor”.+