El Papa ayuda a refugiados ucranianos con suministros médicos
- 3 de marzo, 2022
- Ciudad del Vaticano (AICA)
El Limosnero apostólico, cardenal Konrad Krajewski se encargó de entregar la ayuda en la basílica de Santa Sofía en Roma
A través de la Limosnería Apostólica, el papa Francisco envió ayuda a los refugiados de Ucrania: suministros médicos que fueron entregados en la basílica de Santa Sofía en Roma, lugar de encuentro para la comunidad ucraniana en la capital de Italia.
El 2 de marzo el limosnero apostólico de su santidad, el cardenal Konrad Krajewski, se encargó de entregar la ayuda y la cercanía del Santo Padre. De este modo, se une al llamamiento lanzado en los últimos días por la propia comunidad ucraniana en Italia, que solicitaba material sanitario.
“El Vaticano está dispuesto a ayudar a los necesitados, y no se fija en la nacionalidad, sino en el hombre necesitado”, declaró el cardenal Krajewski.
De acuerdo a la información del Vaticano, la ofrenda de Francisco incluye jeringas, curitas y desinfectantes, entro otros materiales. Este es un primer envío al que seguirá otro con medicamentos.
Desde hace días salen desde la citada basílica camiones cargados de alimentos y productos de primera necesidad, destinados a las personas que sufren la guerra. Numerosos camioneros ucranianos han ofrecido sus camiones para llevar ayuda a sus compatriotas.
Agradecimiento del Papa a los polacos
El regalo del Papa llegará en los próximos días a Lviv, la ciudad más cercana a la frontera con Polonia. Precisamente, en la audiencia general de ayer, Miércoles de Ceniza y jornada de oración y ayuno por Ucrania, el pontífice agradeció a los polacos su acogida a los refugiados que huyen del conflicto entre Rusia y el país ucraniano.
“Ustedes fueron los primeros en apoyar a Ucrania, abriendo sus fronteras, sus corazones y las puertas de sus hogares a los ucranianos que huían de la guerra. Les ofrecieron generosamente todo lo que necesitan para vivir con dignidad, a pesar del drama del momento. Les estoy profundamente agradecido y los bendigo con todo mi corazón”, fueron las palabras que el obispo de Roma les dedicó.
La Limosnería Apostólica también está proporcionando dinero a los nuncios que viven en las zonas más difíciles del país con el fin de apoyar las realidades en dificultad. Así, la última ayuda se destinó al nuncio de Rumanía, que está asistiendo a los refugiados ucranianos alojados en diversas estructuras de la red eclesial.+