El envío y la distribución fueron supervisados por el limosnero papal, Card. Konrad Krajewski.
La ayuda se dirige especialmente a los heridos de guerra. Se trata de un lote de medicinas por un valor de 100 mil euros. No es la primera donación que el pontífice envía a esa tierra martirizada.
El cardenal Konrad Krajewski, limosnero papal y prefecto del Dicasterio para el Servicio de la Caridad, inauguró en Nápoles, la quinta lavandería dedicada al pontífice.
El Papa presidirá la misa de la Jornada Mundial de los Pobres, el próximo 19 de noviembre, y después almorzará con un grupo de personas necesitadas en el Aula Pablo VI.