El libro del Papa a los miembros de la Curia para los ejercicios espirituales
- 18 de febrero, 2021
- Ciudad del Vaticano (AICA)
"Tened al Señor en el corazón", es el título de la obra que Francisco obsequió a sus colaboradores, que este año no podrán participar comunitariamente en los ejercicios espirituales de Cuaresma.
“Este año no tendremos la gracia de poder contar con un predicador de los ejercicios. La situación actual (por la pandemia) impide la reunión de personas y por ello no podremos ir juntos a la casa de ejercicios”, escribe el papa Francisco en la carta que acompaña al libro “Abbi a cuore il Signore”.
El pontífice quiso regalar a los cardenales residentes en Roma, a los jefes de los dicasterios y a los superiores de la Curia romana, quienes habitualmente acompañaban al Papa en los ejercicios espirituales en la Casa Divino Maestro, de la localidad italiana de Ariccia.
Este año, debido a las normas restrictivas impuestas a causa del coronavirus, el Santo Padre y sus colaboradores curiales no podrán "participar juntos" del tradicional encuentro espiritual al inicio de la Cuaresma.
Por ello, Francisco los anima a que, cada uno tome esos días para hacer los ejercicios espirituales donde le sea más conveniente.
“Yo también me uniré a todos haciendo los ejercicios aquí”, anticipó el pontífice.
A raíz de esta situación, el Papa decidió enviar a cada uno de sus colaboradores el libro "Abbi a cuore il Signore" (Ediciones San Pablo, editado por el padre Daniele Libanori), con la esperanza de que pueda ayudarlos en su vida espiritual.
El maestro di San Bartolo, monje de un monasterio del mismo nombre, es el autor del volumen Abbi a cuore il Signore (Tened al Señor en el corazón). Se trata de un antiguo manuscrito –una especie de colección de notas en hojas sueltas escritas a mano en latín eclesiástico– que data probablemente del siglo XVII y que se encontró en Ferrara, Italia, en uno de esos mercadillos que suelen deparar sorpresas inesperadas.
En el prefacio, el padre Libanori dice que se trata de apuntes para uso personal en la predicación destinados por el maestro de San Bartolo a varios discípulos. El escrito también es rico en meditaciones y notas con numerosas referencias bíblicas.
"Lo que se puede extraer de estas notas es una sabiduría de sentido común, pero no carente de interés. Ciertamente están fechados no menos que el lenguaje, pero documentan una sensibilidad y experiencia de la Iglesia en la dirección espiritual", escribe el padre Libanori en el prefacio.
En el volumen hay también un pequeño tratado sobre los pecados capitales. "Todo ello contribuye a crear, tantos años después, una lectura útil, para superarse a sí mismo e ir más rápidamente hacia Dios", subraya el padre Libanori.
Tal como lo había anunciado la Oficina de Prensa de la Santa Sede, el pasado 20 de enero, “dada la persistencia de la emergencia sanitaria", este año no será posible vivir comunitariamente los ejercicios espirituales de la Curia romana en la Casa Divino Maestro de la localidad italiana de Ariccia.
El Santo Padre invitó por lo tanto a los cardenales residentes en Roma, a los jefes de los dicasterios y a los superiores de la Curia romana a hacerlos personalmente, retirándose en oración, desde la tarde del domingo 21 al viernes 26 de febrero.
Asimismo, se recordó que durante esa semana se suspenderán todos los actos del Santo Padre, incluida la Audiencia General del miércoles 24 de febrero.+