El Card. Sandri concluyó su visita a las iglesias orientales en el exilio
- 25 de junio, 2019
- Ciudad del Vaticano
El cardenal argentino Leonardo Sandri, prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales, concluyó ayer, lunes 24 de junio, su peregrinación de cuatro días a los Estados Unidos, con el objetivo de visitar a las iglesias orientales estadounidenses.
"Fue una oportunidad para ver por mí mismo, para tocar con mis propias manos, para vivir al menos por unos instantes la vida misma de estas Iglesias en los Estados Unidos, para confirmarlas en nombre del Santo Padre alabando su fidelidad", se lee en la declaración del dicasterio para las Iglesias Orientales.
Durante su visita el prefecto de la Congregación para la Iglesias Orientales, mantuvo un encuentro con la comunidad de la eparquía de San Nicolás de los Ucranios, en la llamada "Villa Ucrania" de Chicago, una zona en la que los emigrantes de Europa del Este se han concentrado a lo largo de las décadas. El cardenal Sandri visitó la majestuosa catedral, veneró el icono del tiempo litúrgico a la entrada del santuario y después se trasladó a la iglesia dedicada a los santos Vladimiro y Olga, donde fue recibido por una delegación de fieles y sacerdotes.
En esta eparquía ? explica el comunicado de la Congregación para las Iglesias Orientales ? existe de hecho una división entre los fieles de la generación antigua, fieles a su propia identidad tradicional, y los llegados más recientemente. Mientras que el primer grupo acepta voluntariamente el uso del calendario gregoriano, los otros para no vivir la separación con sus familias y parientes en Ucrania piden poder seguir adoptando el calendario juliano en uso también entre los greco-católicos del país.
Después de una visita a la cancillería y a la residencia del obispo, el cardenal argentino se dirigió a la sala del Museo de Arte Moderno ucraniano, que a menudo acoge encuentros para el clero y los fieles de la eparquía, donde mantuvo un encuentro con los sacerdotes y los laicos, en el que hubo una serie de preguntas dirigidas al cardenal sobre el papel de la Iglesia greco-católica ucraniana, sobre el funcionamiento de la Congregación, sobre la manera de implicar a los laicos ? en particular a las mujeres ? en la vida de la Iglesia católica oriental.
El domingo 23, el prefecto se unió a la celebración del 50º aniversario de la elevación de la arquidiócesis de Pittsburgh de los Rutenos.
El cardenal Sandri presidió la misa en la catedral de Pittsburgh y durante su homilía aseguró a los fieles que "están siempre presentes en el pensamiento del Santo Padre" y que "esta peregrinación es para traerles su saludo y bendición".
A continuación el prefecto de la Congregación para las Iglesias Orientales recordó el camino recorrido que llevó a la institución de las circunscripciones rutenas, y la normativa regularizada por el Papa Francisco, que permitió una "plena y mejor atención pastoral de los fieles laicos católicos orientales" según su propio sistema disciplinario, "incluso fuera de los territorios nacionales".
"Demos gracias ?concluyó? porque incluso los momentos difíciles vividos en la Iglesia, si se afrontan con profunda fidelidad al Señor, generan frutos de madurez y de conciencia que son un don que brilla en todos los tiempos, como lo es toda gracia que viene del cielo".
Finalmente el purpurado argentino invitó a "cultivar la memoria", "redescubrir las propias raíces", a seguir viviendo la vocación y la identidad de la Iglesia Bizantina Rutena en los Estados Unidos, lo cual significa, "seguir siendo misioneros", expresó, y los animó a permanecer "siempre abiertos y disponibles a la acción del Espíritu" en los corazones y comunidades, a rezar "en torno a la roca de Pedro y de sus sucesores".
Al final de la celebración, el cardenal Sandri entregó al obispo metropolitano William Charles Skurla, la medalla de plata del pontificado del papa Francisco. +