Viernes 15 de noviembre de 2024

El ayuno de tres días de Nínive antes de la visita del Papa a Irak

  • 26 de enero, 2021
  • Bagdad (Irak) (AICA)
Los cristianos en Irak están asaltando el cielo, suplicando que la pandemia termine y el viaje apostólico del papa Francisco pueda tener lugar.
Doná a AICA.org

El patriarca de la Iglesia Caldea, cardenal Louis Sako, inició este 25 de enero un ayuno de tres días bajo el lema "Resurrección de Nínive".

El ayuno alude a la conversión y el ayuno de los habitantes de la antigua Nínive bajo la influencia de la predicación del profeta Jonás y al acontecimiento histórico del siglo VIII, cuando el ayuno de tres días de los cristianos liberó a la Mesopotamia de la plaga.

El ayuno de tres días consiste en abstenerse de comer hasta el mediodía o la noche, y la participación diaria en los servicios y la Eucaristía. "Lamentémonos de nuestros pecados, recemos por la liberación del coronavirus, reflexionemos sobre el sentido de nuestra vida, cumplamos nuestras obligaciones con nuestros hermanos y hermanas, expresemos nuestra solidaridad con los enfermos y desempleados, démosles una mano amiga", apeló el cardenal Sako.

“En nuestra Iglesia, explicó el patriarca, este ayuno de tres días es muy importante, tiene casi el mismo significado que la Cuaresma . Está relacionado con la historia de Irak. Hubo una gran epidemia en el siglo VIII y el entonces patriarca Ezequiel anunció un ayuno de tres días al pueblo de Nínive para que la plaga terminara. Hoy estamos en una situación similar debido a la pandemia de coronavirus".

"Esta es una buena oportunidad para intensificar nuestras oraciones, pedir la salvación de una pandemia, así como la conversión a la hermandad, superando los fundamentalismos, renunciando a la violencia y mostrando solidaridad con todos. De hecho, la gente reza mucho durante este tiempo. Nuestras iglesias están llenas”, destacó el purpurado iraquí.

En una entrevista con Radio Vaticano, el cardenal Sako aseguró que a pesar de dos recientes ataques terroristas en Bagdad, los preparativos para el viaje papal -del 5 al 8 de marzo- avanzan con normalidad. 

El patriarca de la Iglesia caldea destacó que sus compatriotas están ansiosos con la llegada del Papa. “Él es para ellos como el profeta Jonás para el pueblo de Nínive. Creemos que puede iniciar un nuevo proceso de cambio. “Él nos traerá dos cosas: consuelo y esperanza, que hasta ahora se nos han negado”, dijo el cardenal Sako.

También señaló que los ataques en Bagdad fueron de carácter político. Fueron una señal para el nuevo presidente de los Estados Unidos. Pero la situación en Irak no cambió, aseguró el patriarca.

En Irak, el autodenominado Estado Islámico ha vuelto dramáticamente a cobrar protagonismo, llevando a cabo una serie de incursiones y atentados, el más grave de ellos la semana pasada con el doble atentado suicida en el centro de Bagdad que dejó 32 muertos y más de un centenar de heridos. 

“La gente siempre pregunta cuándo llegará la paz, la defensa de la dignidad humana, aunque desde hace casi 20 años estamos en una situación similar, hay confusión, anarquía”, acotó el patriarca Sako y añadió: “Por lo tanto, se necesita tiempo. Pero antes de tiempo se necesita buena voluntad por parte de los políticos. Si no hay eso, no habrá paz. Las milicias también deben obedecer al gobierno iraquí y éste debe imponer la retirada de las armas. Todo debe quedar en manos del gobierno y no de los partidos políticos”.+