Con un llamado a "caminar juntos", Mons. Canecín puso en posesión al nuevo párroco de Esquina

Con una misa presidida por el obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, tomó posesión de la parroquia Santa Catalina, en Esquina, el presbítero Juan José Godoy.

El obispo de Goya, monseñor Adolfo Ramón Canecín, puso en posesión de la parroquia Santa Catalina, de la ciudad de Esquina, a su nuevo párroco, presbítero Juan José Godoy.

Concelebraron la Eucaristía los sacerdotes Juan Carlos Mendoza y Pablo Esteban Stortti, de quienes el obispo destacó el acompañamiento, como expresión de comunión del clero.

En su homilía, el prelado recordó que "todos los bautizados somos cristianos" y que el sacramento del Bautismo produce una "configuración sacramental". También destacó que los obispos, sacerdotes, religiosas y diáconos, recibieron el "orden sagrado" que los "configura sacramentalmente con Jesucristo, el Buen Pastor" y en esa línea llamó a preguntarse: "¿Soy parecido al Pastor?".

Dirigiéndose al nuevo párroco, monseñor Canecín recordó haberlo conocido muy joven, cuando ingresó al seminario interdiocesano “La Encarnación” de Resistencia, Chaco, en tiempos en que el obispo era rector de esa casa de formación sacerdotal, "sin saber que yo iba a ser obispo", porque "eso estaba en el corazón de Dios", señaló. A su vez, el padre Juan Carlos Mendoza fue formador del seminario.

La conciencia sinodal fue uno de los aspectos que destacó el obispo, al considerar que "nos necesitamos todos: El obispo sin sus sacerdotes no puede hacer nada, pero, tenemos que caminar juntos". A su vez, destacó que el departamento de Esquina es "fecundo en vocaciones" , y presentó a un joven de esa ciudad que  ingresará este año al seminario, además de los sacerdotes y seminaristas oriundos de esa ciudad con los que ya cuenta la diócesis.

“Jesús es el único Pastor, que nunca nos va a defraudar", destacó el prelado, y puntualizó: "Los que fuimos llamados para representarlo, hacerlo presente, visible, tangible y palpable en medio de la comunidad somos vasos de barro".

Al referirse a la sinodalidad, el obispo destacó la importancia de ser comunidad: "La Iglesia está llamada a ser reflejo de la Trinidad" para poder “reflejar el rostro de Dios" expresó.

Al finalizar su homilía, recordó que la diócesis de Goya transita el Año Jubilar al celebrar los 60 años de su creación y que la propuesta diocesana es "vivir una fuerte experiencia de Pentecostés".

En ese sentido, llamó a la comunidad a "caminar juntos", a apoyar y acompañar al padre Juan José Godoy, en su nueva tarea, para que “se configure existencialmente, en la animación pero también en la corrección fraterna" porque la "vocación de sacerdote es reflejar a Cristo. Tenemos que ayudarnos, todo es recíproco y todos debemos caminar juntos".

Finalmente llamó a ser “una Iglesia en salida misionera, con todos los bautizados", caminando juntos para formar una Iglesia con estilo sinodal, “que es el estilo de Dios”.+