Sábado 11 de enero de 2025

Catamarca: apertura del Año Jubilar en El Suncho y en Piedra Blanca

  • 11 de enero, 2025
  • San Fernando del Valle de Catamarca (AICA)
Fue en el marco del 142° aniversario de la muerte del beato Mamerto Esquiú. Presidió el obispo Luis Urbanc, quien recordó: "Todos tenemos que entrar en el corazón de Dios".
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La comunidad diocesana de Catamarca participó el 10 de enero de las ceremonias de apertura del Año Jubilar en las localidades de El Suncho y Piedra Blanca.

Las celebraciones estuvieron encabezadas por el obispo de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, y se enmarcaron en la conmemoración de los 142° del fallecimiento del beato Mamerto Esquiú.

Los actos en el Departamento La Paz, se iniciaron con la peregrinación desde la Plazoleta de los Niños en la localidad de Esquiú hasta la capilla de El Suncho, lugar donde murió Esquiú.

En el portal de ingreso al predio de El Suncho, se llevó a cabo la ceremonia de apertura de la Puerta Santa en la que se dio lectura al Evangelio y se leyó un extracto de la bula de convocatoria del Papa Francisco, tras lo cual, monseñor Urbanc invitó a vivir este Jubileo Ordinario 2025.


En la homilía, el obispo catamarqueño expresó: "¡Qué hermoso que podamos estar en este solar desde donde Cristo se llevó a su lado a un servidor, al beato Mamerto Esquiú! Esto tiene una gran simbología que la tenemos que aprovechar".

Mons. Urbanc explicó que "el sentido de pasar una puerta es entrar a un lugar, y todos tenemos que entrar en el corazón de Dios", enfatizando que "en esto, nuestro querido Esquiú fue un campeón". 

"A cuánta gente ha hecho pasar por esa puerta de la misericordia para encontrarse con el abrazo del Padre Celestial. Todo esto tiene que estar presente durante este Año", sostuvo.

Antes de la bendición final, fray Pablo Reartes compartió la carta de fray Emilio Andrada, ministro provincial de la Provincia Franciscana de la Asunción, en la que se dirige "a los peregrinos que ven en el beato Esquiú un testimonio de santidad".

Acto seguido, el obispo bendijo la escultura del beato Mamerto Esquiú tallada en madera, que fue realizada por el artesano Cristian Alejandro Ibarra, de La Quinta, departamento La Paz, donada por el municipio de Recreo.

Este viernes 10 de enero, día en que se cumple el 142° aniversario del paso a la gloria del Beato Mamerto Esquiú, el obispo diocesano Mons. Luis Urban? dará Apertura al Año Jubilar en El Suncho, departamento La Paz, Decanato Este, por la mañana; en tanto que, por la tarde, hará lo propio en el templo de San José de Piedra Blanca, departamento Fray Mamerto Esquiú, Decanto Centro.

Ceremonia en la tierra natal de Esquiú
Durante la tarde del viernes, monseñor Urbanc inició al Año Jubilar en el templo histórico San José de Piedra Blanca, tierra natal del beato Esquiú.

Con la apertura de esta Puerta Santa, para el Decanato Centro, se completó el cronograma que arrancó en la catedral basílica y santuario de la Virgen del Valle, y continuó en la capilla San Maximiliano Kolbe del Servicio Penitenciario Provincial y el santuario de la Gruta de la Virgen del Valle, para el Decanato Capital, el santuario de Nuestra Señora de Belén, para el Decanato Oeste, y El Suncho, para el Decanato Este, constituidos en los centros de peregrinación dispuestos en el territorio diocesano para obtener las indulgencias plenarias en este año de gracia y conversión.

El rito inicial del Jubileo de la Esperanza se realizó en el predio del Polideportivo Vial y después se realizó la peregrinación con las imágenes de la Virgen del Valle y de Esquiú, que se detuvo por un momento frente a la casa natal del beato y luego bordeó la plaza llegando al templo San José.


Allí, luego de la veneración de la Santa Cruz en el umbral del templo, se abrió la Puerta Santa, y monseñor Urbanc presidió la misa.

En la homilía, el obispo catamarqueño recordó que "este Año Jubilar nos está preparando para llegar al otro punto de inflexión de la vida de Cristo, que es su muerte y su resurrección, acontecimiento del cual vamos a celebrar los 2.000 años en 2033".

Monseñor Urbanc alentó a entrar con "mucho ánimo a este Año Jubilar, con mucha decisión, con muchas ganas; les dejo la consigna de que hagamos pesebres permanentemente a lo largo de este año", porque "en el pesebre comienza la historia de amor de Dios con nosotros y culmina en la cruz cuando Él muere y al tercer día resucita para nosotros, y a los 50 días nos regala el Espíritu Santo para que nos vaya recordando este plan amoroso de Dios".

"Que proclamando la misericordia de Dios, cada uno de nosotros se vea purificado, sanado, restablecido, renovado, y que el mundo pueda creer con esperanza que Dios está con nosotros. Que nuestra querida Madre, la gran peregrina que acompaña al pueblo fiel, esté a nuestro lado para que este año sea muy provechoso para cada uno de nosotros, para nuestras familias, para nuestra sociedad toda", concluyó.+