Lo hizo en un mensaje a la comunidad del Centro de Formación para el Diaconado, en el que destacó las figuras de san Felipe, diácono, y san Juan XXIII, como ejemplos de servicio y entrega.
Fue en la catedral local, donde el administrador apostólico, Mons. Giobando, los animó a ser generosos y humildes en el servicio, y les agradeció a sus familias, que los acompañan en esa misión.
El Santo Padre dirigió un discurso a los diáconos que se preparan para el sacerdocio en la diócesis de Roma. La reunión, prevista para el sábado, se aplazó por motivos relacionados con su salud.
Durante seis días, compartieron diversos momentos de oración, reflexión y actividades recreativas. También abordaron el tema de la Pastoral Vocacional, para trabajar conjuntamente durante el año.