La devastación psicológica y material, sumada a la crisis económica, marca el clima de frustración y miedo generado por el reciente terremoto, dijo el padre Karakach OFM.
El padre Jacques Mourad -monje sirio del monasterio de Deir Mar Musa, que será ordenado arzobispo de Homs de los católicos sirios a principios de marzo- recorrió las devastadas calle de Alepo.
"Todos estamos en shock por lo que pasó. No bastaba la guerra, no bastaba la pobreza, ahora el terremoto", lamentó el párroco latino de Alepo, fray Bahjat Elia Karakach OFM.
Luego de su reconstrucción, tras los enormes daños sufridos durante la guerra civil que devastó a Siria, reabrió sus puertas la catedral maronita de San Elías, de Alepo.