Una "capilla rodante" acerca la Iglesia al barrio
- 8 de agosto, 2019
- Montevideo (Uruguay)
Acercar a los fieles a la fe, vencer la indiferencia religiosa y "llevar la Iglesia a los barrios", son algunas de las motivaciones que llevaron al padre Omar França, párroco en Malvín Nuevo en Montevideo, a idear "una capilla rodante", que llevase la fe a aquellos lugares donde la gente está "más distante".
La idea surgió precisamente de la feria, contó el padre Omar, al ver que llegaban camiones especialmente acondicionados para la venta de pescado o queso, se propuso hacer algo similar pero con la Iglesia, con el objetivo de poder acercarla a los vecinos que, por distintos motivos, no llegan hasta el templo.
En el exterior del vehículo se lee una invitación a "subir y tener un momento de paz, oración o meditación espiritual". La construcción de esta capilla rodante demandó cerca de dos meses y medio.
En el interior cuenta con dos sillones, un ejemplar de la Sagrada Escritura y con música que acerque a Dios. En la parte delantera está el confesionario, totalmente aislado de sonido, para que las personas que lo deseen se acerquen al sacramento de la reconciliación.
La capilla rodante visitará habitualmente las tres ferias del barrio, en las calles Aceguá, Dalmiro Costa y Santiago de Anca, explicó el padre França.
La inauguración de la capilla rodante se efectuó el 4 de agosto, en la parroquia Santa Bernardita, ocasión en la que también la parroquia inauguró un campanario del que carecía. Con los antiguos rieles del tranvía, se hizo un nuevo campanario de ocho metros de altura. En él se colocó el instrumento, reacondicionado con un badajo que es una bola de bronce macizo.
Tras la bendición de la campana se procedió a la bendición de la capilla rodante y después se celebraron ambos acontecimientos con una pequeña fiesta parroquial. +
