Servir a Dios y buscar el bien de los hermanos, aconsejó Mons. Araya al nuevo diácono

El obispo de Cruz del Eje, monseñor Ricardo Araya, ordenó diácono camino al sacerdocio a Gabriel Alejandro Romero.

En una celebración presidida por el obispo de Cruz del Eje, monseñor Ricardo Araya, el sábado 5 de septiembre en el santuario Nuestra Señora del Tránsito y Santo Cura Brochero, fue ordenado diácono camino al sacerdocio el seminarista Gabriel Alejandro Romero.

Sujeto a las medidas sanitarias correspondientes a la pandemia, la misa se llevó a cabo sin presencia de fieles y fue transmitida a través de Canal Brochero y de las redes sociales de la diócesis y del santuario.

En su homilía, monseñor Araya expresó “alegría y agradecimiento” por la ordenación de Gabriel. “Los físicamente presentes somos pocos, pero somos una gran cantidad de hermanos presentes espiritualmente en esta celebración; presentes virtualmente o presentes en la oración que cada uno eleva al Padre de todos, por Jesús Servidor en el Espíritu Santo”, manifestó.

El obispo saludó especialmente a la familia de Gabriel, a sus amigos, al Seminario de Río Cuarto, obispo, formadores, docentes, empleados y compañeros seminaristas. “Agradezco también al Seminario de Rosario y a quienes colaboraron en la formación de Gabriel en la diócesis de Cruz del Eje”, añadió. “Saludos a los sacerdotes de la diócesis que han hecho el esfuerzo de no venir y que están satisfechos, orgullosos y disponibles para integrar la diaconía de Gabriel”.

“Me gustaría invitarlos a imaginar que por un momento estamos contemplando la procesión de San Roque un 18 de agosto en Villa de Soto y, ayudados por la imaginación, contempláramos los rostros curtidos de los peregrinos, las manos juntas, los hombres grandes, las mujeres y los niños. Y que escucháramos como el Señor nos repite al oído: ‘¿Viste como quiero a mi pueblo? Es por eso que elijo y llamo a este servidor’”, reflexionó. “Gabriel, Dios  te ha llamado por amor a su pueblo para servir no sólo a algunos sino a todo el pueblo. Y el Señor sigue llamando, ¿Habrá quien escuche? ¿Habrá quien acompañe?”, se preguntó.

“Hoy la Iglesia plantea que es muy conveniente que antes de recibir el presbiterado te ejercites como discípulo misionero de Jesús Servidor, don y desafío que no desaparecerá de tu vida ungida, al contrario, cuanto más identificado con Jesús Pastor tanto más servidor de los hermanos. Servidor de los hermanos más vulnerables, servidor de la vida como viene”, animó.

“Siempre la vocación cristiana es un ‘bajar’ para servir humildemente. Nunca es un ‘subir’ para dominar y oprimir”, advirtió el obispo, deseando “que tu vida de servicio a partir de la consagración diaconal nos recuerde a todos al único Maestro que no vino a ser servido sino a servir, servir dando la vida. Que tu consagración diaconal nos recuerde la diaconía que se espera del presbítero y la diaconía que se espera del obispo. Que nos recuerde que la Iglesia es siempre una comunión que se dispersa en la variedad de servicios para estar siempre cerca y acompañar toda forma de pobreza”.

Finalmente, aconsejó: “Acordate de Brochero, cómo le gustaba hablar del Evangelio, cómo rezaba la liturgia de las horas, acordate de su compromiso con la misa cada día, de cómo le gustaba andar, salir y llegar hasta el rancho más lejano, y hacer que los sintiera parte de la familia de los pobres”.

“Por eso este momento de tu vida se inserta por un tiempo considerable  que denominamos etapa pastoral; en un servicio pastoral de la realidad variada de una parroquia y en la dinámica vida de un santuario”, señaló. “Hace falta un grado suficiente de madurez humana para vivir feliz encarnado el bajo perfil de un servidor.  Y sólo si se tiene la certeza de que Dios nos ama siempre, se puede volver a empezar una y otra vez a servir mejor a la gloria de Dios que es lo mismo que buscar el bien de los hermanos”, concluyó.

El nuevo diácono ejercerá su ministerio en la parroquia y santuario de Nuestra Señora del Tránsito y Villa Cura Brochero, tanto para la atención del santuario como de la parroquia y las capillas que se encuentran en su jurisdicción.+