Schevchuk: La guerra en Ucrania, una puja entre el bien y el mal
- 25 de marzo, 2022
- Kiev (Ucrania) (AICA)
Al analizar la dimensión espiritual del crisis bélica, el patriarca católico consideró que es "la confrontación más reciente de la manifestación del bien -la verdad de Dios-, y del mal -del diablo-".
El arzobispo mayor de la Iglesia greco-católica ucraniana, su beatitud Sviatoslav Shevchuk, lamentó este viernes 25 de marzo que en la cultura actual “el bien y el mal se han fundido en una sola cosa” y que “la gente no entienda la diferencia entre lo que da la vida y lo que la mata”.
“A veces parece que la voluntad de un dictador inicuo pretende ser la verdad objetiva. Y el pueblo, las personas que defienden la verdad pueden ser condenadas a muerte por millones”, expresó en su mensaje diario a la comunidad.
El patriarca católico reconoció que “la lucha ucraniana, la guerra en Ucrania, plantea preguntas morales muy profundas al mundo. Preguntas que hacen entender que nunca hay que hacer pasar el bien por el mal y el mal por el bien”.
“Nunca hay que transigir con el mal. Y la indiferencia a esta pregunta, la indiferencia a la necesidad de distinguir el bien del mal, mata. Lo vemos hoy en nuestra patria”, sostuvo.
“Por esto, la agresión militar de Rusia contra Ucrania y los crímenes de guerra de los ocupantes rusos plantean profundas cuestiones espirituales y morales”, explicó.
Monseñor Schevchuk afirmó que hoy la guerra en Ucrania “tiene una gran dimensión espiritual”, al considerarla “la confrontación más reciente de manifestación del bien -la verdad de Dios-, y del mal -del diablo y sus ángeles-”.
Texto del mensaje diario
¡Alabado sea Jesucristo! Queridos hermanos y hermanas en Cristo, hoy es 25 de marzo de 2022 y Ucrania lleva ya 30 días de esta terrible guerra. Ya van 30 días que los rusos están atacando, matando a nuestra gente... La agresión rusa se va llevando vidas, destruye nuestras ciudades y pueblos. Cada noche los misiles rusos, las granadas, las bombas caen sobre los techos de los pacíficos ucranianos...
¡Pero Ucrania sigue luchando! Y con su lucha, con su empeño en no quebrarse, hace que se planteen muchas preguntas...
¿Existe hoy algo por lo que merezca la pena dar la vida? ¿Existe realmente una verdad objetiva e inmutable que pueda dar sentido a tu vida? ¿Existe realmente un mal objetivo e innegable contra el que debemos luchar con todas nuestras fuerzas?
En la cultura actual, cultura que se llama " de la post-verdad", el bien y el mal se han fundido en una sola cosa... La gente no entiende la diferencia entre lo que da la vida y lo que la mata...
A veces parece que la voluntad de un dictador inicuo pretende ser la verdad objetiva. Y el pueblo, las personas que defienden la verdad pueden ser condenadas a muerte por millones.
La lucha ucraniana, la guerra en Ucrania, plantea preguntas morales muy profundas al mundo. Preguntas que hacen entender que nunca hay que hacer pasar el bien por el mal y el mal por el bien. Nunca hay que transigir con el mal. Y la indiferencia a esta pregunta, la indiferencia a la necesidad de distinguir el bien del mal - mata. Lo vemos hoy en nuestra patria.
Por esto, la agresión militar de Rusia contra Ucrania y los crímenes de guerra de los ocupantes rusos plantean profundas cuestiones espirituales y morales. Decimos que hoy la guerra en Ucrania tiene una gran dimensión espiritual. Es la confrontación más reciente de manifestación del bien - la verdad de Dios, y del mal - del diablo y sus ángeles...
Hoy el mundo entero volverá sus ojos hacia Ucrania y Rusia. Hoy dedicaremos Ucrania y Rusia al Corazón Inmaculado de María junto con el Santo Padre. Y esto tendrá lugar en todo el mundo. Todos los obispos de la Iglesia universal realizarán este acto.
¿Qué significa esto? Significa que de ninguna manera podemos estar de acuerdo, cooperar con este mal que sale de Rusia hoy en día. Y por eso debemos rezar por su conversión, por la erradicación de ese mal, para que -como dijo la Virgen de Fátima- “no destruya a otras naciones, no provoque otra guerra mundial...”. Nosotros los cristianos tenemos la obligación de rezar por nuestros enemigos.
Nosotros te dedicamos a vos, querida Ucrania al Corazón Inmaculado de María, porque hoy ¡necesitamos tanto la victoria del Bien! Y Ella, la que con su “Sí” a Dios, aplastó la cabeza de la serpiente milenaria, está hoy con nosotros.
Que la protección de la Santísima Virgen María y de toda la milicia celestial de los ángeles, bajo la dirección del Arcángel San Miguel, triunfen en esta lucha espiritual. Y Ucrania, consagrada al Corazón Inmaculado de María, ya vence y ya se mantiene en esta lucha.
Recen por nosotros. Recen por los niños de Ucrania. Recen por las ciudades y pueblos que mueren hoy en nombre de la libertad mostrando que existe una Verdad que libera. Y los héroes, los héroes que dan su vida por Ella, no mueren, sino que de la muerte pasan a la vida.
La bendición del Señor y su misericordia descienda sobre ustedes por su divina gracia y amor y permanezcan ahora y siempre y por los siglos de los siglos, amén.
¡Alabado sea Jesucristo!.+