Murió un sacerdote de la diócesis de Quilmes
- 2 de septiembre, 2024
- Quilmes (Buenos Aires) (AICA)
El presbítero Miguel Hrymacz falleció a los 81 años. Había pertenecido a la orden basiliana y fue párroco, durante 45 años, de la Inmaculada Concepción de la Medalla Milagrosa.
La diócesis de Quilmes comunicó el fallecimiento del presbítero Miguel Hrymacz a los 81 años de edad, la cual se produjo el sábado 31 de agosto .
Sus restos mortales fueron velados el domingo 1° de septiembre en el salón de la parroquia Inmaculada Concepción de la Medalla Milagrosa, en Florencio Varela, donde se desempeñó como párroco.
Luego, miembros de comunidad ucraniana realizaron, según el rito ucraniano católico, la celebración fúnebre y, a las 17, el obispo diocesano, monseñor Carlos Tissera, presidió la misa exequial. Sus cenizas serán colocadas próximamente en el cinerario de ese templo parroquial.
Tanto el diocesano como su obispo auxiliar, monseñor Eduardo Redondo, invitaron a rezar por el eterno descanso del padre Hrymacz, por el consuelo y fortaleza en el dolor de su familia y amigos, de la comunidad ucraniana y de su comunidad parroquial.
El presbítero Miguel Hrymacz había nacido el 10 de febrero de 1943, en el seno de una familia que participaba del rito ucraniano católico. H
Hasta julio de 1965 fue miembro de la orden basiliana. Luego, manifestó a su superior que se había decidido a ser sacerdote secular. Así fue que, perteneciendo a la diócesis de Avellaneda, cursó los estudios de teología en el seminario metropolitano de Buenos Aires, en Villa Devoto, y el 25 de diciembre de 1969 fue ordenado sacerdote según el rito bizantino ucraniano, e incardinado en el Exarcado Apostólico para los fieles ucranianos en la Argentina.
Luego de su ordenación, quedó a plena disposición de su diócesis original, manteniendo el privilegio del biritualismo que ejercía, atendiendo también a la parroquia ucraniana de la calle Supisiche, en Avellaneda. En febrero de 1970, fue designado vicario colaborador en la parroquia Inmaculada Concepción, de Quilmes, y también vicario sustituto de la parroquia Nuestra Señora de la Paz, de Bernal.
En marzo de 1972, fue nombrado delegado diocesano para la Pastoral Juvenil y, dos años después, fue designado párroco de San José y Santa Cecilia, en Berazategui. En 1976, una vez creada la diócesis de Quilmes, Hrymacz continuó su servicio en esa Iglesia particular y, el 1° de julio de 1977, asumió como representante legal del colegio Santa Cecilia y del jardín Rayito de Sol. En 1996, se le asignó también la representación legal del jardín Medalla Milagrosa.
El 8 de diciembre de 1978, el obispo de entonces, monseñor Jorge Novak, creó la parroquia Inmaculada Concepción de la Medalla Milagrosa, en Florencio Varela, y lo nombró párroco de esa comunidad, a la que acompañó durante 45 años.
Con una acción de fuerte impronta social, fue asumiendo diversos servicios diocesanos y acompañando así los ministerios de los sucesivos obispos que estuvieron al frente de la diócesis quilmeña. Integró, de esa manera, los consejos presbiterales y pastorales, así como el Colegio de Consultores. Fue también, con varios mandatos, decano de Florencio Varela.
Hasta 2018 fue vicario de la Pastoral Social de Quilmes, cargo que ocupó durante 31 años. Integró además la Comisión por la Campaña '40 días de Solidaridad' y fue delegado diocesano de Pastoral Social para la Conferencia Episcopal Argentina (CEA).
Hasta su fallecimiento, presidía la Fundación Padre Miguel, donde se custodia la vida de niños y familias. También acompañaba al grupo "La Fe del Centurión", que promovió la visita a diversos lugares de la imagen de la Virgen de Luján que había estado en las Islas Malvinas durante el conflicto bélico con el Reino Unido.
Durante la última etapa de su vida, a pesar de varios problemas de salud que lo aquejaban, siguió viviendo con fe, alegría, templanza y entrega su ministerio, dejándose ayudar por los que que lo asistían.+