Nuestra Señora de La Merced, en Ensenada recibió a su nuevo párroco
- 9 de marzo, 2022
- Ensenada (Buenos Aires)
El padre Fernando Contarino SDB tomó posesión el pasado 5 de marzo, en una misa presidida por el arzobispo de La Plata, monseñor Fernández.
La parroquia Nuestra Señora de la Merced, que es Casa Salesiana en Ensenada, tiene nuevo párroco. El arzobispo de La Plata, monseñor Víctor Manuel Fernández puso en posesión el pasado 5 de marzo, al padre Fernando Contarino SDB, quien estará sucediendo al padre Francisco De Rito SDB.
En su homilía, el arzobispo mostró cómo en la lectura del Deuteronomio se habla del fruto de las cosechas e "invita a realizar una ofrenda a Dios, reconociendo que todo nos viene de Él: la tierra, la vida, los bienes, las propias capacidades, las propias fuerzas”.
Por eso, expresó: “Esta ofrenda debe ser un sincero acto de amor, gratitud y reconocimiento. Lo podemos hacer todos cada domingo, ofreciéndole al Señor todo lo bueno que pudimos entregar y expresando nuestra ofrenda en la colecta de la misa. También lo hace hoy el padre Fernando, ofreciendo al Señor todo lo que ha vivido y entregado en su sacerdocio hasta ahora, y pidiendo las fuerzas para iniciar esta nueva etapa”.
Luego, retomando el Evangelio, monseñor Fernández explicó el sentido de las tres tentaciones: “La primera (convertir las piedras en pan) es pretender una vida sin piedras, sin obstáculos, sin dificultades, sin desafíos. Eso nos vuelve nerviosos, ansiosos, negativos, porque inevitablemente todos los días y todas las semanas hay algo que no funciona bien, algo que nos rompe los esquemas”.
La segunda tentación, según explicó el arzobispo, “es la búsqueda de fama, gloria y reconocimientos, y entonces estamos demasiado atentos a lo que dicen de nosotros, a la apariencia, y eso nos vuelve esclavos”.
Finalmente, aclaró que la última es “la tentación de tirarse al abismo pretendiendo que Dios nos va a salvar. Así no funcionan las cosas. Porque el Señor nos da todo, nos acompaña y nos ayuda, pero nos dio capacidades para que pongamos algo de nuestra parte”.
Al final de la misa, el arzobispo bendijo a la comunidad Ensenadense, para que “pueda vivir una nueva etapa llena de vida y de fervor misionero, pastoreados por el nuevo párroco”.+