Mons. Uriona llamó a rezar por más vocaciones para la Iglesia

El obispo de Río Cuarto consideró muy importante unirse en la oración pidiendo a Dios por las vocaciones en estos momentos de la Patria, porque "hay carencia de sacerdotes en muchos lugares".

El obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, monseñor Adolfo Armando Uriona FDP, celebró la misa del cuarto domingo de Pascua en la parroquia San Cayetano, donde llamó a rezar por las vocaciones, en particular por los jóvenes para que “sean generosos y puedan decir que sí, confiando en el Señor”, por los seminaristas y por los sacerdotes.

Haciendo referencia al Evangelio, el prelado explicó que los pastores “eran una figura muy común en el pueblo de Israel” y, aunque muchas veces se los imagina con una vida tranquila, en realidad no era así. 

“En el clima riguroso de la zona de Israel, los pastores tenían que llevar a los rebaños de una parte hacia otra para conseguir buenos pastos. Siempre estaban en soledad con el rebaño y alejados de sus familias. Y eran normalmente las personas más pobres y despreciadas de la sociedad”.

“La figura del pastor en el Antiguo Testamento se aplica primeramente a Dios y después a los reyes, como los que tenían que cuidar al pueblo para que tuvieran los elementos necesarios para una vida digna”, y recordó que en el Antiguo Testamento los profetas enseñaban que Dios recriminaba a los reyes “por no haber sido buenos pastores de su pueblo, por quererse aprovechar, por no cuidar, sino al contrario, por sacar ventaja del rebaño”. 

“Por eso, cuando Jesús dice de sí: ‘yo soy el Buen Pastor y el Buen Pastor da la vida por sus ovejas’, se diferencia del pastor asalariado que cobraba un sueldo por cuidar a las ovejas, pero ‘nunca se jugaban por ellas, más bien, les importaba cuidar su propio pellejo’”.

Como este domingo se reza de manera especial por las vocaciones sacerdotales, de consagración y de los que tienen un ministerio de la Iglesia, el pastor riocuartense consideró: “Es muy importante que hoy nos unamos en la oración pidiendo a Dios por las vocaciones en estos momentos que vivimos, porque hay carencia de sacerdotes en muchos lugares”.

“Que tengamos la capacidad de tener un corazón semejante al Buen Pastor, de dar la vida por las ovejas y que se nos conceda la gracia a nosotros, sacerdotes, pobres pecadores, de ser buenos pastores de nuestro pueblo, para acompañarlo en su caminar hacia Dios. Que María Santísima y que San Cayetano, que fue un Buen Pastor, nos den esta gracia en este día tan particular”, concluyó.+