Mons. Uriona: "La vida cristiana es un combate"

El obispo de Río Cuarto reflexionó, en este primer domingo de Cuaresma, sobre las tentaciones de Jesús y las propias tentaciones: "Nunca Dios va a mandar tentaciones que superen nuestras fuerzas"

En su homilía de este primer domingo de Cuaresma, el obispo de Villa de la Concepción de Río Cuarto, monseñor Adolfo Armando Uriona FDP, opinó: "Si el hombre se confía en Dios y lucha contra la tentación, saldrá vencedor. Pero si no confía en Dios y se deja estar entonces sucumbe a la tentación. Esa es la realidad de todo ser humano". 

Además, el obispo resaltó que Jesús se pone en la fila de los pecadores, sin ser pecador. 

Luego, reflexionó sobre cada tentación de Jesús. En cuanto a la primera tentación, resaltó que "no son las cosas materiales lo importante sino fundamentalmente Dios. El hombre vive de la Palabra de Dios.". 

Con respecto a la tentación del poder, monseñor Uriona destacó que "el servicio es lo que nos ayuda a vencer esta tentación". 

Finalmente, aparece la tentación de lo maravilloso. Pero, ante esto, el prelado advierte que la vida cristiana es un combate. "Siempre es un combate y tenemos que luchar con la gracia de Dios", exhortó. 

Para terminar, advirtió: "Nunca Dios va a permitir tentaciones que superen nuestras fuerzas. Con la tentación nos dará la gracia para resistirla. A través del ayuno, oración y limosna, que podamos luchar contra todo lo que nos aparta de Dios. Ese es el objetivo de la cuaresma", concluyó.