Mons. Martínez: 'Corazones fervientes, pies en camino'

El obispo de Posadas eligió, para su carta semanal, el mismo título que el Papa le puso a su mensaje sobre las Misiones, cuya jornada se celebró en la Argentina este domingo 8 de octubre.

El obispo de Posadas, monseñor Juan Rubén Martínez, utilizó como título para su carta semanal el mismo que eligió el Papa Francisco para su mensaje en ocasión de la Jornada de las Misiones, celebrada en la Argentina el domingo 8 de octubre: “Corazones fervientes, pies en camino”, el cual se inspira, explicó el prelado posadeño, en el relato evangélico acerca de los discípulos de Emaús.

Al respecto, el diocesano se refirió a los tres aspectos sobre los que el Papa propone meditar este año en relación con el itinerario de los discípulos misioneros: “Se trata de tres imágenes sugestivas: los corazones que arden cuando Jesús explica las Escrituras, los ojos abiertos al reconocerlo y, como culminación, los pies que se ponen en camino”, indicó.

En cuanto a la primera de esas imágenes, monseñor Martínez citó el comentario de Francisco, cuando dice: “Dejémonos entonces acompañar siempre por el Señor Resucitado, que nos explica el sentido de las Escrituras. Dejemos que Él encienda nuestro corazón, nos ilumine y nos trasforme, de modo que podamos anunciar al mundo su misterio de salvación, con la fuerza y la sabiduría que vienen de su Espíritu”.

Refiriéndose a la segunda imagen, recordó que para dar fruto debemos permanecer unidos a Jesús, a lo cual añadió que “esta unión se realiza a través de la oración diaria, en particular en la adoración, estando en silencio ante la presencia del Señor, que se queda con nosotros en la Eucaristía”, para agregar a continuación: “El discípulo misionero, cultivando con amor esta comunión con Cristo, puede convertirse en un místico en acción. Que nuestro corazón anhele siempre la compañía de Jesús”.

Al glosar el tercer aspecto, el obispo de Posadas expresó: “Finalmente, contemplamos los pies que se ponen en camino, con la alegría de anunciar a Cristo Resucitado”, lo cual manifiesta “la eterna juventud de una Iglesia siempre en salida”.

A modo de conclusión, el prelado posadeño citó una vez más el mensaje de Su Santidad: “Pongámonos de nuevo en camino también nosotros, iluminados por el encuentro con el Resucitado y animados por su Espíritu. Salgamos con los corazones fervientes, los ojos abiertos, los pies en camino, para encender otros corazones con la Palabra de Dios, abrir los ojos de otros a Jesús Eucaristía, e invitar a todos a caminar juntos por el camino de la paz y de la salvación que Dios, en Cristo, ha dado a la humanidad”.+