Jueves 26 de diciembre de 2024

Mons. Han Lim Moon: "¡Hacer la voluntad de Dios con amor y fidelidad!"

  • 31 de octubre, 2020
  • San Martín (Buenos Aires) (AICA)
El obispo auxiliar de San Martín, Mons. Han Lim Moon, n la solemnidad de Todos los Santos, dijo que el secreto para alcanzar la santidad es "hacer la voluntad de Dios con amor y fidelidad".
Doná a AICA.org

En su homilía para el domingo 1 de noviembre, en la solemnidad de Todos los Santos, el obispo auxiliar de San Martín, monseñor Han Lim Moon, tomó a los santos para predicar: “Es muy bueno tenerlos no sólo porque ellos son tus amigos intercesores ante Dios, sino también porque te atraen y te motivan a ser santo o santa como ellos”.

El obispo contó que de niño leía historias de santos y que en el seminario “me inculcaron aún más entusiasmo por la santidad, el cual permanece hasta el día de hoy”. Por eso, preguntó a cada uno: “¿No quieres ser santo, santa?”. Y aunque algunos puedan pensar que es “para los piadosos, virtuosos, sacrificados, heroicos, religiosos, sacerdotes”, monseñor Moon dijo que no es así.

De este modo, el obispo explicó que “todos los cristianos por el bautismo nos unimos a Jesús, el Santo de Dios, formamos parte de su cuerpo y recibimos su Espíritu Santo. Entonces, por estar íntimamente unidos al Santo ya somos santos. Por eso, al comienzo de la Iglesia llamaban ‘santos’ a todos los cristianos, más allá de sus comportamientos”. 

Jesús “al decirnos que seamos perfectos y misericordiosos como Dios Padre, nos está indicando caminar para llegar a la plenitud de nuestra santidad”. Pero aclaró que “aún no hemos recorrido todo el camino para un comportamiento coherente y digno de lo que somos: Cuerpo de Jesús, hijos de Dios que llevamos al Espíritu Santo”.

Entonces monseñor Moon describió a quienes vivieron la santidad: “De manera sencilla y humilde según su estado; como casados, solteros, consagrados, y desde sus tareas cotidianas”. Y mencionó lo que tienen en común todos los santos: “¡Hacer la voluntad de Dios con amor y fidelidad! Y así, llegar a la felicidad auténtica”.El camino que hay que seguir para alcanzarla es “a través de las bienaventuranzas del Evangelio de hoy. Es cierto que este camino les implica mucho sufrimiento a causa de Él, sin embargo, Jesús los proclama felices porque ya están en camino a la felicidad. ¿No te parece que vale la pena optar por este camino?”, preguntó a la comunidad.

El prelado dejó tres consejos para comenzar el camino: “Ante todo, tomar conciencia de cuán valiosos somos ante Dios y optar por vivir lo que somos, ¡hijos de Dios!”; “luego, discernir si nuestra vida está en sintonía con la voluntad de Dios. Si no es así, corregirnos”; “y hacer las tareas de siempre pero como las haría Jesús, cambiando la actitud interior en la motivación, el modo de actuar y la finalidad”.

“Hoy el Señor te anima a ser santo -dijo por último-. También a mí después de haberte anunciado esta Buena Noticia (…) Querido amigo, querida amiga, ¡Jesús es quien te hace santo! Pero, ¡no sin tu consentimiento y colaboración!”.+