Mons. Han Lim Moon explicó el sentido de la fiesta de Corpus Christi

Jesús "convirtió el pan en su cuerpo y el vino en su sangre para que, al comer su cuerpo y beber su sangre, Él, siendo el autor de Amor y Vida, pueda entrar en nosotros", dijo monseñor Han Lim Moon.

El obispo auxiliar de San Martín, monseñor Han Lim Moon, reflexionó con el evangelio del domingo, al celebrar la solemnidad del Cuerpo y la Sangre de Cristo.

“Dios se enamoró tanto de nosotros, sus creaturas y pecadores, que envió a su único Hijo quien se hizo hombre para compartir nuestra vida humilde”, comenzó afirmando el obispo. “Para rescatarnos de la muerte, Él entregó su vida en nuestro lugar. Y después de su resurrección, al volver junto al Padre, nos envió el Espíritu Santo, para que su amor divino no se apartara nunca de nuestro corazón”, agregó.

En esta oportunidad, el obispo auxiliar de San Martín quiere dejar claro que “el amor de Dios era grande” porque “antes de ascender al cielo, encontró un modo muy original para no separarse nunca de nosotros y acompañarnos hasta el fin del mundo misteriosa pero realmente unido a nosotros”.

De este modo, Jesús “convirtió el pan en su cuerpo y el vino en su sangre para que, al comer su cuerpo y beber su sangre, Él, siendo el autor de Amor y Vida, pueda entrar en nosotros”. Así, “Él crea una comunión de amor en cuerpo, alma y corazón para que no sea posible separarse de nosotros”, aseguró.

Monseñor Moon aclaró que “esta comunión de amor que Jesucristo ofrece es para todos. Sin embargo, su amor es muy personalizado porque es una comunión de amor con cada uno en cuerpo, alma y corazón”.

Y aseguró que “los que entramos en comunión profunda con Jesucristo, por esta misma comunión, formamos la comunión también entre todos los que lo recibimos”, porque “el pan que nos da la fuerza para caminar en este mundo es esta comunión profunda de amor con Jesucristo y, en Él, con los demás hermanos”.

Esto nos lleva a una comunión entre los que comulgamos ese pan y con Él: “Así proclamaremos a todos esta Buena Noticia de la comunión de amor con Jesucristo misteriosa pero real para la gloria de Dios Padre”. Por eso, explicó que la procesión luego de la misa del Corpus Christi se realiza una procesión con el Santísimo Sacramento cuyo sentido es “proclamar a todos los hombres esta Buena Noticia por todos lados y, hoy más que nunca por esta circunstancia de pandemia, también por todos los medios de comunicación”.+