Mons. García Cuerva llamó a la 'conversión' a quienes están al servicio de la comunidad
- 6 de noviembre, 2023
- Buenos Aires (AICA)
El arzobispo porteño apeló a palabras del Papa sobre el carrerismo y el clericalismo, que pueden aplicarse a cualquier ámbito, recordando un dicho popular: "Al que le quepa el sayo, que se lo ponga".
El arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, señaló que los protagonistas de las tres lecturas del domingo son personas que deberían estar al servicio de la comunidad.
“Creo que las lecturas de hoy nos tienen que llamar a todos a la reflexión, pero especialmente a la dirigencia política, a la dirigencia empresarial, a la dirigencia sindical, a la dirigencia religiosa; en definitiva, a todos los que tenemos alguna responsabilidad en la comunidad”, puntualizó.
“Creo que la palabra de Dios es luz que viene a iluminar las oscuridades que tenemos en la vida. Y creo que a veces, como dirigentes, tenemos algunas oscuridades que me parece bueno que reconozcamos, y que hoy las lecturas nos dicen”, planteó, y agregó: “La lucha por el poder, buscar reconocimientos y aplausos, vivir pendientes de la imagen y vivir pendientes del cargo, vivir haciendo trampa, como hacían esos fariseos, que le hicieron algunas operaciones a Jesús para hacerle decir lo que no había dicho”.
El arzobispo porteño advirtió sobre “la incoherencia de vivir alejados de la vida, especialmente de la vida de nuestra gente, que está atravesada por problemas económicos, que está atravesada por la inflación”, y lamentó la situación de “las madres que viven quebradas por el problema de la droga en los barrios, con sus hijos, y tantas situaciones difíciles que vive nuestro pueblo, situaciones que a veces la dirigencia las conoce de muy lejos, de demasiado lejos”.
Tras citar el poeta Pablo Neruda, cuando decía: “¿Cómo comprenderán mis versos quienes no tocaron mi sangre?”, consideró: “A veces estamos demasiado lejos de la sangre de nuestro pueblo y entonces no comprendemos verdaderamente lo que le pasa”.
Monseñor García Cuerva recordó que, hace unos días, el Papa Francisco tuvo una intervención en la reciente asamblea sinodal, en la que decía: “Cuando los ministros se exceden en su servicio y maltratan al pueblo de Dios, desfiguran el rostro de la iglesia con actitudes machistas y dictatoriales. Es doloroso encontrar, en algunos despachos parroquiales, una lista de precios de los servicios sacramentales, al modo de un supermercado. O la iglesia es el pueblo fiel de Dios en camino, santo y pecador, o termina siendo una empresa de servicios variados. Y cuando los agentes de pastoral toman este segundo camino, la iglesia se convierte en el supermercado de la salvación, y los sacerdotes son meros empleados de una multinacional”.
“Es la gran derrota a la que nos lleva el clericalismo. Y esto con mucha pena y escándalo. Basta ir a las sacristías eclesiásticas de Roma para ver el escándalo de sacerdotes jóvenes probándose sotanas y sombreros, o albas y roquetes con encaje. Continúa el Papa diciendo que el clericalismo es un látigo, es un azote, es una forma de mundanidad que ensucia y daña el rostro de la esposa del Señor, y esclaviza al santo pueblo fiel de Dios. Y el pueblo de Dios, el santo pueblo fiel de Dios, sigue adelante con paciencia y humildad, soportando los desprecios, el maltrato, las marginaciones de parte del clericalismo institucionalizado. Y con cuánta naturalidad hablamos de los príncipes de la iglesia, o de promociones episcopales como ascensos de carrera: los horrores del mundo, la mundanidad que maltrata al santo pueblo fiel de Dios”, completó el arquidiocesano.
El primado argentino consideró que, “en este texto fuerte, el Papa nos cuestiona, y creo que las lecturas de hoy y estas palabras de Francisco nos tienen que llamar a todos a la reflexión y a la conversión”.
“Digo a todos, a toda la dirigencia política, empresaria, religiosa, pero a cada uno de nosotros que también tiene responsabilidad, aunque sea como padre de familia, ni más ni menos. A la reflexión y a la conversión de todos”, sostuvo.
“Porque no faltará quien diga: 'Se refiere solamente a los políticos. ¿Acaso estarán hablando de mí? ¿Serán críticas para toda la dirigencia?' Y entonces, me acuerdo de aquel dicho popular que dice: ‘Al que le quepa el sayo, que se lo ponga’”, concluyó.+