Mons. Fernández: "Ustedes son dignos de una tierra, un techo y un trabajo"

El arzobispo de La Plata visitó el barrio ex Planeadores de Los Hornos, en donde bendijo la primera capilla para "asegurar el acompañamiento espiritual y la cercanía de la Iglesia con esas familias".

El arzobispo de La Plata, monseñor Víctor Manuel Fernández, se dirigió al barrio Ex Planeadores de Los Hornos, donde se construirá un nuevo barrio. 

Allí bendijo la primera capilla y creó la vicaría pastoral “Jesús misericordioso”, con la finalidad de asegurar el acompañamiento espiritual y la cercanía fraterna de la Iglesia con esas familias. Al mismo tiempo, designó al presbítero Tomás Gutiérrez a cargo de esta vicaría y se reunió con los miembros de la nueva comunidad.

En su reflexión, monseñor Fernández se dirigió de manera directa a cada uno de los presentes para recordarles “su inmensa dignidad como seres humanos, el amor que Dios tiene a cada uno, y el amor que deben tenerse a sí mismos, porque más allá de que a algunos nos haya tocado nacer en una situación de pobreza y muchos límites, todos somos inmensamente valiosos a los ojos de Dios y estamos llamados a luchar para salir adelante, a poner todos nuestros esfuerzos para construir algo mejor. Y tenemos que hacerlo con la cabeza alta, porque hay un amor infinito que nos sostiene”.

Asimismo, destacó que “tener una tierra y una casa es algo importante, porque nos ayuda a sentirnos arraigados en este mundo, nos ayuda a reconocer nuestra dignidad, como si a través de las paredes de nuestra casa, Dios y la humanidad nos estuvieran abrazando y conteniendo”. 

Sin embargo, subrayó, “falta la tercera T, el trabajo, porque no hay vida digna si uno no se toma en serio a uno mismo, si no valora las capacidades que Dios le ha dado y las ejercita para salir adelante. Que en este barrio crezca el amor al trabajo porque eso sin duda nos hará mucho bien”.

Monseñor Fernández recordó a los presentes que la Iglesia “quiere estar entre ustedes, junto a ustedes, en medio de ustedes. Por eso empezamos con esta capilla y seguiremos con un templo más grande en otra parte del barrio, además de salas para Caritas, catequesis, reuniones”.

Finalmente, manifestó: “La Iglesia está incluso en las cárceles, acompañando a los presos, ¿cómo no va a estar aquí con ustedes, animándolos en sus esfuerzos por salir adelante con la fuerza del Señor? Pero también se trata de construir comunidad, de caminar juntos, de apoyarnos y contenernos unos a otros. Esa también es una vocación de la Iglesia de Jesús”.+